Encuentro 3
Laboratorio de Cerámica
Para este laboratorio se dispuso el espacio a manera de Workshop, acomodando los materiales necesarios para este primer acercamiento hacia el modelado de arcilla, que posteriormente se convertirán en piezas de cerámica.
La líder del proyecto compartió elementos básicos relacionados con la arcilla y la cerámica, así como resaltar las manos que se dedican al cuidado, que han cargado un bebé, cultivan habilidades como la delicadeza, control de presión y firmeza, entre otras.
Materiales:
Arcilla (1 kg por participante), liencillo, kit de herramientas, bowls plásticos, dispensadores de agua, agua, jabón, crema.
Elaboración de dos tazas con técnicas de moldeado en arcilla (pellizco y churros).
La representación autoreferencial a través de una pieza cerámica explora la identidad propia y la autorreflexión de quien la hace, a la vez que traza un puente frente a su relación con el mundo.
La cerámica se convierte en un medio para expresar sus propias experiencias, emociones y pensamientos, mediante el modelado de la arcilla para transmitir su estado de ánimo, su historia personal o sus características distintivas, con la amplia posibilidad para utilizar símbolos, metáforas o elementos narrativos que estén en sintonía con aspectos significativos de su vida y/o de su experiencia. Posibilita generar una conexión más íntima y personal.
Cabe destacar que cada participante tendrá su propia forma única de abordar dicha representación. La elección de formas, detalles y elementos visuales dependerá del sentir, el estilo y la visión artística de cada creadora/cuidadora/estudiante.
La palabra "anidar" resulta clave en nuestros laboratorios ya que evoca un sentido profundo de conexión, intimidad y pertenencia en nuestros lazos afectivos. Alude al acto de crear un espacio seguro y acogedor donde se cultiva el amor, la confianza y la ternura, donde se pueden expresar libremente las emociones.
Anidar implica construir un nido emocional donde nos sentimos protegidas y amadas, donde podemos ser nosotras mismas sin miedo al juicio o al rechazo. Es un proceso de crear un refugio emocional, tanto físico como simbólico, donde podemos encontrar calma, empatía, consuelo y apoyo mutuo.
Cuando anidamos en nuestras relaciones, establecemos vínculos sólidos y nutritivos. Nos comprometemos a cultivar el crecimiento personal y compartido, nutriendo el amor, la comunicación y la complicidad.
En el acto de anidar, encontramos la belleza de la intimidad y la cercanía. Se trata de construir un hogar emocional donde podemos ser vulnerables y auténticas, donde podemos explorar y compartir nuestros sueños, esperanzas y temores. Anidar nos permite sentirnos arraigadas y conectadas en nuestras relaciones, creando un sentido de pertenencia.
Es un recordatorio de la necesidad de construir lazos sólidos y profundos, donde el amor y la conexión florezcan y nos permitan crecer juntos.
Encuentro 4
Esmaltado de las piezas cerámicas elaboradas en el laboratorio anterior (hace 15 días).
Materiales participantes: traer delantal y pinceles.
Materiales suministrados por el laboratorio: lijas 280, 600. Liencillo, bowls plasticos, agua, recipientes con sistema spray, trapos, esmaltes (amarillo limón, amarillo fuego, naranja, rojo, vinotinto, verde, azul oceano, azul turquí, negro, blanco), jeringas, mezcladores/paletas, pinceles.
Según elección personal se decoran y pintan las superficies externas e internas de las tazas realizadas, ya que son una representación personal en el mundo a través de un artefacto.
Este encuentro se convierte en una oportunidad única para compartir, conversar y conocerse entre las personas que participan en el proyecto. Durante el proceso, se establecen conexiones y se generan diálogos en torno a las experiencias de vida, las emociones y los significados simbólicos que cada una desea transmitir a través de su taza.
A medida que se avanza, las tazas se llenan de colores y diseños, se crea un espacio de introspección donde cada persona reflexiona sobre su propia identidad, sus valores y sus deseos. La decoración de las tazas se transforma en una forma de autorepresentación.
El acto de decorar las tazas no solo es una experiencia artística, sino también un proceso terapéutico y liberador. Conforme cada participante se sumerge en la pintura y en la creación, pueden canalizar sus emociones, explorar su creatividad y fortalecer su autoestima. Se crea un ambiente de apoyo y respeto mutuo, donde se valora la diversidad de perspectivas y se celebra la singularidad de cada una.
Encuentro 5
Ruptura y reconstrucción.
Se reconoce el importante papel del ruido y la música, en los territorios domésticos y universitarios, desde un acercamiento sonoro, poético y sensible a las vibraciones de las mujeres.
Entre rupturas y reconstrucciones, donde el silencio susurra secretos, se entrelazan ruido y música, en los confines del hogar y la academia.
En los territorios domésticos, el ruido retumba, una sinfonía de risas, llantos y conversaciones, un coro de vajillas tintineantes, puertas que se cierran y se abren. Se van entrelazando la vida cotidiana con las aulas universitarias, la música envuelve los ecos del pasado que se desvanece , y se alza la voz interior en un telón que acompaña el conocimiento, notas que danzan en la mente y el espíritu, envolviendo los hogares y las aulas en un abrazo sonoro, que revela su poder transformador.
El ruido, rebelde y audaz, rompe esquemas y barreras, empodera voces, desafía lo convencional, mientras despierta el alma con las vibraciones femeninas que reverberan y laten con fuerza, resuenan emociones y nuevas determinaciones, como un rugido que, se cuela por las grietas del silencio. Estalla en cada rincón del ser, rompiendo cadenas y liberando anhelos, reconstruyendo sueños.
Mientras susurra al corazón en este encuentro de lo sonoro y lo íntimo, las mujeres se reconocen y se hacen escuchar, sus vibraciones trascienden los muros, empapando el mundo de un sentir sin cesar. Así, tejiendo historias, en la sinfonía de la vida, el ruido y la música danzan en particular unión, nos invitan a escuchar y sentir, la fuerza de las mujeres, en su esplendor y pasión.
Sesión fotográfica - Registro fotográfico de cada pieza cerámica elaborada (taza) y se entregaron a lxs participantes.
Cada taza única, moldeada a mano con delicadeza y amor, cada pieza convertida en lienzo, listo para ser llenado con historias y sentimientos. Se puede sentir la importancia de ese mundo del cuidado, de las labores domésticas que a menudo puede pasar desapercibido pero que es fundamental para el bienestar de todos.
Cada taza creada era un reflejo del propio viaje. En ellas, se entrelazaban la intuición, el sentir y la memoria, transmitiendo mensajes de amor, perseverancia, resiliencia y empoderamiento. Cada taza se convertía en un artefacto cargado de significado, invitando a detenerse, reflexionar y disfrutar de momentos de conexión y autoidentificación.
Cruzar un puente entre lo doméstico y lo académico, entre el cuidado y la expresión artística. Recordando lo valioso de abrazar nuestras experiencias, de encontrar el equilibrio entre los roles que desempeñamos y así descubrir la belleza en los momentos más simples de la vida.