Cuatro Caños
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Durante las obras de ensanche y mejora de la antigua Carretera de Castilla ( León Gijón), impulsadas por Gaspar Melchor de Jovellanos y diseñadas por José Palacio San Martín en 1779, el ingeniero responsable Manuel Reguera González realizó en las inmediaciones de esta vía la Fuente de los Cuatro Caños o Fuente de La Corredoria. Se trata de una fuente pública compuesta por un cuerpo de sillares de forma curva y triangular, con esquinas en forma de pilastra, decorada con molduras superiores, y toro y escocia que levantan la gruesa bola de remate.
Hoy en día persisten tres de los cuatro caños que tuvo en sus orígenes y un largo pilón de planta semicircular- En el fuste tiene una inscripción en latín , relativa al años de inauguración , responsables, etc,... que dice:
CAROLI IV REGIS JUSU ET LARGUITIONE
GEGIONENSIS VIA SALIS VECTIGALIBUS
FACTA STRUCTI AQUEDUCTOS SALIENTES
ADJUNCTI LEONE DE PUGA FEIJOO ASTURICENSE
SENATORE COETUS VIARI PRAESIDE
CURANTE REGUERA ARCHITECTO
ANNO MDCCXC.
POR MANDATO Y GENEROSIDAD DEL REY CARLOS IV
SE HIZO CON CARGO A LOS IMPUESTO DE LA SAL
ESTA CALZADA DE GIJON Y SE CONSTRUYERON
ESTOS CAÑOS QUE AQUI MANAN
SIENDO COMISARIO LEON DE PUGA
FEIJOO, REGIDOR DE ASTURIAS
PRESIDENTES DE LA JUNTA DE CAMINOS,
Y SIENDO ARQUITECTO REGUERA
AÑO 1790.
Junto con el Mojón de la Media Legua, ubicado en Corredoria Baja en dirección a Lugones, constituye en un ejemplo paradigmático de instalación pública de la Ilustración. Su agua procede de los manantiales del monte Naranco y es potable, manteniéndose operativos tres de los cuatro caños originales. Fue declarada monumento el 2 de abril de 1982.
Detrás de la fuente se localiza un lavadero con una techumbre en forma de paraguas realizada por el arquitecto Ildefonso Sánchez del Río, artífice de la estructura similar que se puede encontrar en la Plaza del Paraguas de Oviedo de la que este lavadero constituye un anticipo.
Manuel Reguera González ( el autor de la Fuente)
Nació en Candás( 27 julio 1731). Hijo de Toribio Regueras, maestro de obras que le inició en las técnicas de la construcción. Su formación se vio completada cuando al tiempo que estudiaba matemáticas en la Universidad de Oviedo era adiestrado por Pedro Antonio Menéndez . En 1752 comienza a trabajar como aparejador y mano derecha del maestro de obras Menéndez, ocupando su puesto cuanto éste se encontraba ausente. Ese mismo año, apoyado por su maestro y por el regente Gil de Jaz, consiguió la plaza de maestro de obras de la ciudad de Oviedo y ocupó este cargo hasta 1777.
En 1757 el ayuntamiento de Oviedo sufragó los gastos para que Reguera estuviese titulado como arquitecto, ya que la normativa otorgaba competencia exclusiva a la Academia de San Fernando para nombrar arquitectos.
El título de arquitecto le permitió seguir al frente de las obras públicas además de granjearle trabajos a cuenta de privados. En 1765 inició las obras de la biblioteca de la Universidad de Oviedo, a cuenta del legado del brigadier Solís, que terminó en 1768. Casi a la par (1765-1770), realizó una de sus obras más importantes: el pórtico monumental del convento de Santo Domingo.
Desde 1768 colaborará con Ventura Rodríguez en diversas obras como el Hospicio, el Hospital, o el Balneario de las Caldas. Muchas de las obras de infraestructura (canalización de aguas y renovación de construcciones civiles y religiosas) de aquellos años se deben a la dirección de Reguera. Falleció en Oviedo en 1798.
El paraguas del lavadero
Obra de lldefonso Sánchez del Río (Haro -La Rioja- 1881, Madrid 1.980).
Fue un reputado especialista en la construcción de cubiertas y grandes luces de hormigón armado. Obtuvo reconocimiento internacional por su innovador sistema de construcción de estructuras laminares onduladas, conocidas como estructuras dovelas-onda, con ellas construyó su gran obra, el Palacio de los Deportes de Oviedo (1961-1975). Fundador de la empresa Dragados y Construcciones y de la fábrica Río-Cerámica. Fue Director General de Carreteras en el periodo entre 1945 a 1951 y falleció el 30 de noviembre de 1980 en Madrid.
(Manuel Menéndez, Raúl García, Vanesa Martínez).
Destaca entre sus primeras obras los mercados municipales de Pola de Siero y Oviedo, los depósitos de agua de Trubia, del Cristo de Oviedo o de Turón, y la estructura volante que da nombre a la Plaza del Paraguas, en Oviedo. A comienzos de los años treinta ejecutó la tribuna del antiguo Estadio Municipal de Buenavista en Oviedo ( hoy derruido) y entre 1968 y 1976 realizó el Palacio de los Deportes de esta misma ciudad. Reputado especialista en la construcción de cubiertas y grandes luces de hormigón armado, entre sus publicaciones en la Revista de Obras Públicas cabe reseñar: «El cuarto depósito de aguas, de Oviedo» (1928), 76, tomo I (2506): 269-272; «El cuarto depósito de aguas de Madrid» (1930), 78, tomo I (2546): 139-145; «Un paraguas de hormigón armado en Oviedo o el ojo clínico del ingeniero» (1931), 79, tomo I (2578): 302-305; «El empleo de articulaciones y rodillos de fibrocemento» (1936), 84, tomo I (2693): 190-193; «El taller de montaje del Instituto de Técnica Aeronáutica, en Torrejón de Ardoz» (1951), 99, tomo I (2830): 55-61; y «La construcción de grandes bóvedas por el sistema de "dovelas-onda"» 1957, 105, tomo I (2905): 205-216.
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CUESTIONARIO
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