Planteamiento y conceptos clave

PLANTEAMIENTO

Aborda el estudio de la identidad de los jóvenes (12-18 años), y cómo su construcción o reconstrucción se puede ver afectada por dos factores, uno objetivo y otro subjetivo. El primero es un fenómeno estructural basado en la posibilidad de hiperconectividad, como característica cultural, que empieza a ser inevitable y que impacta en nuestras formas de acción e interacción. Complementariamente, el segundo factor es subjetivo y se relaciona con la percepción del tiempo de conexión, desde el que se generan experiencias individualizadas sobre los efectos y/o riesgos de la hiperconectividad. Esta confluencia entre lo objetivo y lo subjetivo quiere ser el punto de partida de este proyecto. Entendemos que este punto de confluencia e interrelación no está suficientemente estudiado.

Escogemos a la población juvenil porque son precisamente los más jóvenes los que están viviendo y sintiéndose protagonistas de las posibilidades de la hiperconectividad, a veces sin ser muy conscientes de algunos riesgos –que pretendemos analizar en este proyecto-, como los que se refieren al control del tiempo de conexión (sobreuso, dependencia…), los que se relacionan con la diferenciación social (desigualdad de uso por género, nuevas formas de exclusión por desconexión…), y otros que específicamente están relacionados con factores de vulnerabilidad para la construcción de su identidad (la autoproducción y/o consumo acrítico de información personal, la extimidad, la necesidad de influir…).

Todos ellos apuntan hacia nuevos retos, cuyos efectos estamos empezando a descubrir, y para los que apenas existen respuestas a nivel socio familiar o escolar. Lo que parece que se aplica de forma generalizada es la limitación y/o prohibición del tiempo de conexión. Por ello, careciéndose aun de estudios sobre la efectividad de la prohibición del tiempo de conexión, pretendemos estudiar su impacto, así como cartografiar la legislación/recomendaciones a nivel europeo, estatal, autonómico, y las respuestas específicas de diferentes centros educativos sobre la protección ante los posibles riesgos de la hiperconectividad en los jóvenes.

En última instancia, y con la visión de conjunto aportada por los análisis teórico-normativo y experimental, nos centraremos en concretar las bases pedagógicas que permitan abordar el vacío formativo que pensamos puede estar en la raíz de los problemas asociados al tiempo de conexión de los jóvenes, evidenciando la necesidad de que exista una educación –más allá de la alfabetización- sobre el uso del propio tiempo frente a las pantallas.