Que Nadie Muera Solo

Que nadie muera solo

Acompañar es un acto de amor

En Akaal creemos que cada persona merece ser acompañada en el tránsito de la vida a la muerte. "Que nadie muera solo" no es solo una consigna: es una invitación a despertar humanidad, a estar presentes, a "hacer" incluso cuando desde la medicina se diga que "ya no hay nada más que hacer".

Inspirado en el programa original No One Dies Alone, creado en 2001 por la enfermera Sandra Clarke en Oregón (EE.UU.), esta propuesta la tomamos en Akaal como un gesto de amor y compromiso con la dignidad humana.

¿En qué consiste?

“Que nadie muera solo” es un programa de acompañamiento presencial, emocional y espiritual destinado a personas que transitan su etapa final sin compañía cercana. A través de la escucha, la presencia silenciosa, la palabra o el simple acto de sostener una mano, buscamos ofrecer un último tramo de vida con sentido, ternura y calma.

¿Cómo se lleva adelante?

El acompañamiento se brinda con una mirada compasiva y profunda. Cada encuentro es único, cada persona también. Este programa puede desarrollarse en domicilios, instituciones de salud o residencias, o donde sea necesario

Una semilla en camino

Desde Akaal estamos sembrando la idea de un acompañamiento compasivo para aquellas personas que transitan su etapa final en soledad.  Este espacio aún está en proceso de construcción, con el deseo profundo de que, algún día, ninguna persona tenga que morir sola.

#QueNadieMueraSolo
Akaal – Acompañamiento en fin de vida