3.- FÍSICA

IES EL ASTILLERO              Departamento de Geografía, Historia y Ciencias Sociales

 

CÓMO COMENTAR

UN CLIMOGRAMA

(DIAGRAMA OMBROTÉRMICO) 

DE ESPAÑA

PARA SELECTIVIDAD

 

Tenemos que demostrar varias cosas:

1.- que sabemos analizar el climograma, es decir, que sabemos extraer los datos más importantes

2.- que sabemos interpretar los datos: deducir el tipo de clima (dominio climático) y qué regiones de España ocupa ese clima (localización del dominio climático);  que conocemos la vegetación natural y el tipo de suelo asociados a este tipo de clima;  que conocemos el tipo de régimen fluvial asociado.

 

El objetivo no es señalar las características del clima a partir del nombre de la ciudad o localidad que nos proporcionan en el examen, sino al contrario. Dadas estas precipitaciones, temperaturas,  distribución de  ambas, aridez, etc. -----à Deducir el tipo de clima

 

1ª PARTE: ANALIZAR EL CLIMOGRAMA

 

Supone analizar tres variables: Temperaturas, Precipitaciones y Aridez.

 

Vamos con ello,

 

ANÁLISIS DE LAS TEMPERATURAS

Debemos deducir cuatro cuestiones:

a)      Temperatura media anual

a.       Suma de todas las temperaturas medias mensuales dividida entre 12

b)      Amplitud térmica

a.       Diferencia de la temperatura media del mes más cálido y del más frío

c)      Temperatura del verano

a.       Nº de meses con temperatura media superior o igual a 22º C

d)     Temperatura del invierno

a.       Temperatura media del mes más frío

 

Deducidos los datos numéricos (si es posible exactos, sino aproximados) pondremos calificativos a cada cuestión basándonos en la siguiente tabla:

 

 

 

 

ANÁLISIS DE LAS PRECIPITACIONES:

 

Debemos deducir dos cuestiones:

A)    La Precipitación Total Anual

a.       Suma de todas las precipitaciones mensuales

B)    La Distribución de la precipitación a lo largo del año

                        a.       Señalar los meses secos:     Señalar los meses con precipitaciones de menos de 30 mm 

b.      Indicar las estaciones con mayor o menor precipitación.

Invierno (enero, febrero, marzo), primavera (abril, mayo, junio), verano (julio, agosto, septiembre), otoño (octubre, noviembre, diciembre).

 

Deducidos los datos numéricos (si es posible exactos, sino aproximados) pondremos calificativos a cada cuestión basándonos en la siguiente tabla:

 

 

 

 

ANÁLISIS DE LA ARIDEZ:

 

Debemos deducir dos cuestiones:

A)    La aridez mensual

a.       Índice de Gaussen

Analizar la relación entre la curva de temperaturas y las barras de precipitaciones. Cuando en un mes la barra de precipitaciones se sitúa por debajo de la curva de temperaturas decimos que el mes es seco.

b.      Índice de Lautensach-Mayer

B)    La aridez general

a.       Índice de De Martonne

 

 

 

 

2ª PARTE: INTERPRETAR LOS DATOS:

 

VER RESUMEN EN PÁGINAS 132 A 135 DEL LIBRO DE TEXTO

 

A) LA CLASIFICACIÓN DEL CLIMA Y LOCALIZACIÓN

 

Analizadas las temperaturas, las precipitaciones y la aridez hay que establecer:

 

1.- El tipo y subtipo de clima: oceánico, mediterráneo, de montaña, Canarias

2.- Los factores geográficos y atmosféricos que lo explican (latitud, relieve, distancia al mar, anticiclones, borrascas y frentes)

3.- Localizar qué regiones de España se ven afectadas por ese dominio climático.

            Recuerda que: la amplitud térmica indica la posición en la costa o en el interior

                                   Las temperaturas de invierno y verano que indican su latitud norte o sur

 

B) HIDROGRAFÍA: RÉGIMEN FLUVIAL

            a) Régimen pluvial

            b) Régimen nival

            c) Régimen mixto

           

            Vertientes: atlántica, mediterránea.

 

 

C)  VEGETACIÓN Y SUELOS ASOCIADOS

 

a)      Vegetación

a.       Vegetación de clima oceánico: bosque caducifolio (formaciones primarias y secundarias) , landas, el bosque marcescente

b.      Vegetación de clima mediterráneo: bosque mediterráneo (formaciones primarias y secundarias), el matorral mediterráneo,

c.       Vegetación de ribera

d.      Vegetación canaria

e.       Vegetación de montaña

b)      Suelos:

a.       Suelos zonales de clima oceánico

b.      Suelos zonales de clima mediterráneo

c.       Suelos interzonales

d.      Suelos canarios

 

 

 

 

D) ACTIVIDADES HUMANAS

            Tipo de poblamiento

            Tipo de agricultura (cultivos) LIBRO DE TEXTO, p. 292.

            Producción energética

            Turismo

 

EJEMPLO DE COMENTARIO

 

 

 

 

 

 

I.- Análisis de los valores:

 

            La temperatura media anual es alta ya que roza los 18 º C y la amplitud térmica, de 14 ºC, es una amplitud media. Esta amplitud térmica manifiesta una clara diferencia estacional invierno-verano pero, al no superar los 15º-16ºC, parece corresponder a un espacio litoral. Durante seis meses, de mayo a octubre inclusive, las temperaturas medias mensuales superan los 18 ºC (rebasándose en julio y agosto los 24º-25ºC) por lo que el verano es muy largo y caluroso. El resto del año puede ser calificado como una estación de transición, con un invierno muy suave y templado, puesto que en ningún mes el termómetro desciende de los 10ºC de media.

 

            La precipitación presenta un TPA (Total Pluviométrico Anual) escaso, 454 mm, y una distribución claramente irregular, con máximos otoñales (llama la atención la cuantía del mes de octubre) y precitaciones insuficientes durante el verano. El resto del año, invierno y primavera, registra precipitaciones suficientes, generalmente en forma de lluvia debido a las suaves temperaturas.

 

            Tiene un índice de aridez de 16 según la escala de De Martonne, por lo que podemos calificarlo de semiárido. En cuanto a la aridez mensual, se concentra lógicamente, en los meses de verano. Según el índice de Gaussen tiene 4 meses áridos (de mayo a agosto) y según el índice de Lautensach-Meyer su aridez se reduce a tres meses (junio, julio y agosto)

 

 

II.- Interpretación de los datos:

 

            Tras este análisis podemos deducir que corresponde a un clima mediterráneo marítimo o litoral, y en concreto a la región levantina.

 

La explicación de las características de este clima se debe a factores geográficos y atmosféricos.

           

Desde el punto de vista de las temperaturas, los factores geográficos de latitud y la proximidad al Mediterráneo justifican tanto las temperaturas más cálidas de la mitad sur peninsular, como la moderada amplitud térmica de esta variedad climática litoral. Temperaturas elevadas que son consecuencia directa de masas de aire cálidas de procedencia tropical, como la masa tropical  marítima del anticiclón de las Azores –que define un tipo de tiempo estable y caluroso típico de nuestro verano- o la menos frecuente masa continental africana, cálida y seca, causante de las olas de calor estivales en los meses de julio o agosto.

 

Los máximos pluviométricos suelen darse en otoño, debido a la situación anticiclónica característica del verano –responsable de la aridez estival-, haciendo posible que las borrascas atlánticas alcancen estas latitudes. A ello se suman las precipitaciones producidas por las depresiones mediterráneas y una perturbación no frontal, la gota fría (embolsamiento de aire frío en altura sobre el mar Mediterráneo recalentado a lo largo del verano), responsable de las precipitaciones máximas del mes de octubre, que muchas veces se acompañan de inundaciones y consecuencias catastróficas. Además, las modestas precipitaciones anuales se deben a la posición del Levante español con respecto a la circulación general del oeste, que provoca que las borrascas atlánticas lleguen debilitadas a esta región tras haber atravesado el interior peninsular.

 

            Analicemos ahora la influencia del clima en el medio, hidrografía, vegetación y suelos, principalmente.

 

            En cuanto a la hidrografía, los ríos levantinos (Mijares, Turia, Júcar, Segura) tienen unas cuencas pequeñas o medianas y un régimen fluvial de tipo pluvial o pluvio-nival. El régimen pluvial mediterráneo, con su sequía estival y frecuentes lluvias torrenciales, presenta un acusado estiaje veraniego, aguas máximas en primavera y una importante evaporación a lo largo del año. Su caudal es pobre y con una gran irregularidad con crecidas otoñales muy peligrosas debidas a la gota fría.

 

            La vegetación natural corresponde a la propia de la región mediterránea. Las formaciones típicas son el bosque esclerófilo y perennifolio mediterráneo de encinas, alcornoques, algarrobos y dehesas. Las hojas de este tipo de árboles son perennes, pequeñas y endurecidas, es decir, recubiertas de una membrana que reduce al máximo la evaporación. El tronco es de corteza gruesa y las raíces son profundas, para encontrar agua. La encina es la formación vegetal más extendida de la Península. El sotobosque que acompaña al encinar es complejo, de gran variedad y riqueza, formado por coscoja, jara, lentisco, madroño. Hoy en día no existen encinares climáticos, ya que las roturaciones han creado el sistema  de dehesas. La dehesa es un bosque aclarado o poco tupido, que combina el aprovechamiento forestal con el agrícola y pastoril.

            Los pinares también son muy abundantes. Estas coníferas (pino piñonero, pino carrasco y pino resinero)  han sido introducidas por el hombre y ocupan el espacio que sin intervención humana estarían cubiertos por bosques esclerófilos frondosos.

            El matorral ocupa una amplia extensión den el ámbito mediterráneo español. Corresponde generalmente a un estadio regresivo del bosque esclerófilo. La maquia des una formación de matorral esclerófila, densa y cerrada, compuesta por especies que superan los dos metros de altura y en la que inclso aparecen algunos árboles dispersos. Está compuesta por madroños, brezos, jara, lentisco y retama.

            La garriga es menos densa que la maquia. Las especies dominantes son la jara, la coscoja y algunas plantas aromáticas (romero, tomillo, lavanda).

 

            Los suelos típicos del clima mediterráneo dependen del tipo de roquedo. En la zona levantina el tipo de suelo más común es la tierra parda caliza que, con precipitaciones o riego adecuados, es buena para el cultivo (huertas, cereales, cultivos leñosos).

 

            El paisaje agrario correspondiente a este climograma es el que corresponde al dominio mediterráneo cálido. La agricultura presenta una clara diferenciación entre secano y regadío. El secano se da en las zonas montañosas prelitorales, donde domina la trilogía mediterránea (cereal, vid, olivo). El regadío se extiende el las llanuras costeras dedicándose principalmente al cultivo de hortalizas y frutas. El hábitat tradicional es concentrado en el interior y disperso en la zona litoral.