Por: César COLOMA PORCARI
Presidente del Instituto Latinoamericano de Cultura y Desarrollo
Ahora que, por fin, se intenta recuperar el centro histórico de Lima, queremos recordar un libro publicado en el año 1927 y que constituye una verdadera enciclopedia sobre nuestra ciudad, en ese momento de su historia que coincidió con el apogeo del Oncenio.
Nos referimos a “Lima. La Ciudad de los Virreyes (El Libro Peruano) 1928-1929”, obra de don Cipriano A. Laos, Gerente de “Editorial Perú” e impresa en los talleres de la imprenta Crété, en la ciudad de Corbeil, Francia, en 1927.
El señor Laos planeó su obra en 1925, tal como aparece en las primeras páginas del libro, manifestando en su prólogo que sentía legítimo orgullo, al ver sus “esfuerzos coronados, después de dos largos años de labor”; y que su publicación contenía “preciosos datos estrictamente inéditos y de la más diversa índole… cartas geográficas, planos, fotografías y artísticos dibujos”, agregando que era “sin disputa, la más completa Guía publicada”.
Y en verdad, el material gráfico es sumamente valioso, ya que presenta una imagen de los que fue nuestra ciudad en ese entonces.
Las fotografías sobre diversos monumentos, civiles y religiosos, y los bellos dibujos de casonas virreinales limeñas, constituyen una buena fuente de consulta. Además, los planos de los teatros y viñetas diversas ofrecen una interesante imagen de nuestra ciudad.
Luego de un resumen sobre la organización política del Perú y su economía, se refiere a la situación y clima de Lima, presentando además un esbozo sobre la historia de la ciudad.
Incluye planos detallados por barrios, con todas sus calles y edificios públicos, y describe las principales avenidas, parques, fuentes y estatuas, además de los museos, bibliotecas, el jardín zoológico y todos los cines y teatros.
Agrega valiosa información referente a hospitales y clínicas, con la relación de los principales médicos de la ciudad. Asimismo ofrece muchos datos sobre los periódicos y revistas de la época, tales como “Variedades”, “El Turf”, “Mundial”; escribiendo también sobre los clubes sociales y asociaciones culturales y de beneficencia, incluyendo varias páginas sobre los templos, conventos y monasterios, en los que se refiere a su historia y estado actual.
Pero la parte tal vez más importante de la obra de don Cipriano A. Laos es el “Directorio Comercial de Lima”, que abarca aproximadamente la mitad del libro, en donde aparecen registradas, en orden alfabético, las principales empresas comerciales e industriales de la ciudad, incluyendo su ramo y dirección, y en muchos casos, una descripción abundante sobre sus orígenes y actividades, completando la información con un índice con las doscientas veinticuatro actividades diferentes que desarrollaban las empresas limeñas.
En la obra que estamos tratando es donde aparece notablemente, y por primera vez, un anuncio sobre nuestro “pisco sour”, en la página 552, que a la letra dice: “Morris, Víctor V. – ‘Morris Bar’. Importa directamente toda clase de vinos, licores, cervezas, etc., de los que tiene un selecto surtido de las mejores marcas. Este bar se ha hecho famoso por la exquisita preparación de sus ‘pisco-sour’ y ‘whisky-sour’, etc., en los que emplea licores genuinos. Domicilio: Lima, calle de Boza Nº 847, Tel. 2235” (sic).
Asimismo, en la página siguiente, aparece un aviso del “Morris Bar”, que abarca toda la hoja y en el que también se menciona al “Pisco Sour”, además de otros cocteles que ofrecía su famoso establecimiento. Además, el investigador podrá encontrar en esta obra valiosa información sobre las grandes empresas locales y las inversiones realizadas en la industria y en la construcción, subsistiendo hasta el presente muchas de ellas.
Es importante la relación de empresas medianas y pequeñas, productoras, en la ciudad, de los bienes más diversos, desde conservas hasta ropa hecha, incluyendo muebles, productos agroindustriales y, por supuesto, aparecen también los principales restaurantes, bares y cafés, pastelerías y panaderías, mencionándose, en algunos casos, los principales alimentos y bebidas que ofrecían al público.
Este libro presenta una imagen muy interesante de la ciudad y su consulta es necesaria para todos los que deseen conocer algo sobre la historia de la Lima de la segunda década de este siglo XX que ya termina; y apreciar así cómo el empeño y esfuerzo de un editor pudo lograr hacer realidad una obra que se consulta aún setenta años después de su publicación.
(Publicado en "El Comercio", Lima, 17 de septiembre de 1997, página A-2).