6. El régimen de la Restauración. Características y funcionamiento del sistema canovista

Es muy triste considerar cómo se han hecho las últimas elecciones, con el menor número posible de electores, con bastantes resurrecciones de muertos y no pocas violencias y atropellos. Ya es costumbre que sólo voten los que de una manera u otra sacan partido de las amistades y servicios políticos, y la inmensa mayoría de la nación, mirando tan importante acto con desdén, se abstiene de tomar parte en él, segura de no alcanzar por procedimientos representativos el remedio de sus males. Por esto vemos que no hay gobierno que no saque mayoría en el número y forma que más le cuadra y desde que un bando político, cualquiera que sea, se entroniza en el Ministerio de Gobernación, ya puede estar seguro de que el país le ha de graciar con unas cámaras a su gusto.

Pérez Galdós, B.: “Política española”. Antología de artículos, 1884

Manifiesto de Sandhurst

“[…] Cuantos me han escrito muestran igual convicción de que sólo el restablecimiento de la monarquía constitucional puede poner término a la opresión, a la incertidumbre y a las crueles perturbaciones que experimenta España. Dícenme que así lo reconoce ya la mayoría de nuestros compatriotas, y que antes de mucho estarán conmigo todos los de buena fe, sean cuales fueren sus antecedentes políticos, comprendiendo que no pueda tener exclusiones ni de un monarca nuevo y desapasionado ni de un régimen que precisamente hoy se impone porque representa la unión y la paz.

No sé yo cuando o cómo, ni siquiera si se ha de realizar esa esperanza. Sólo puedo decir que nada omitiré para hacerme digno del difícil encargo de restablecer en nuestra noble nación, al tiempo que la concordia, el orden legal y la libertad política, si Dios en sus altos designios me la confía.

Por virtud de la espontánea y solemne abdicación de mi augusta madre, tan generosa como infortunada, soy único representante yo del derecho monárquico en España.

[…]Sea lo que quiera mi propia suerte, ni dejaré de ser buen español ni, como todos mis antepasados, buen católicos, ni, como hombre del siglo, verdaderamente liberal.”

Alfonso de Borbón.

Nork-Town (Sandhurst, 1 de diciembre de 1874)

pau2005-09

La nuestra es una farsa en toda su desnudez, una completa farsa, especial y exclusiva de las elecciones españolas. Ya se trate de sufragio universal o restringido, no hay sino un solo y único elector: el ministro de la Gobernación, el cual, ayudado por los gobernadores de las provincias y por un ejército de funcionarios de toda clase, sin olvidar a los altos signatarios de la Magistratura y de la Universidad, prepara, ejecuta y lleva a cabo todas las elecciones desde su despacho, bien situado en el centro de Madrid.

Se confeccionan las listas de electores poniendo algunos nombres reales entre una serie de nombres imaginarios y, sobre todo, nombres de difuntos que en el acto de la votación están representados por empleados subalternos vestidos con trajes civiles. El autor de estas líneas ha visto en muchas ocasiones cómo su padre, a pesar de llevar muerto muchos años, acudía a depositar su voto en la urna, en la persona de un barrendero o de un sabueso de la policía vestido para tal ocasión con un terno prestado. [...]

ALMIRALL, Valentí: España tal como es, París, 1886 (Ed. Madrid, 1972, pp. 103-105)

pau2008-01

“Hemos entrado en un nuevo periodo político al que he consagrado mi obra desde 1874. El Ministerio presidido por Canovas había prestado relevantes servicios, terminado la guerra civil en España y en Cuba. Pero no había sabido controlar el orden alcanzado por los sacrificios de todos, con la libertad de todos. Y la nación a pesar de sus desgracias históricas, ama los principios liberales. Y debo decirle que el señor Sagasta los aplica con sinceridad y con deseo de no asustarse de los inconvenientes que trae consigo. Ha colgado la Ley de Imprenta en el Museo Arqueológico de las leyes inútiles; ha abierto la Universidad a todas las ideas y a todas las escuelas; ha dejado un amplio derecho de reunión que usa la democracia según le place y ha entrado en un periodo tal de libertades prácticas y tangibles que no podemos envidiar cosa alguna a los pueblos mas liberales de la tierra: Nosotros, si sabemos mantener la paz pública y el orden regular en las calles y en los campos [….].”

CASTELAR, E: Discursos parlamentarios, 1881

Intervención de Pablo Iglesias en un mitin

Intervención de Pablo Iglesias en un mitin

Huelga general de agosto de 1917.

Huelga general de agosto de 1917

pau2006-03
Julián Besteiro, Largo Caballero, Anguiano y Saborit: el comité de huelga del PSOE encarcelado tras los sucesos de agosto de 1917

Julián Besteiro, Largo Caballero, Anguiano y Saborit: el comité de huelga del PSOE, encarcelado tras los sucesos de agosto de 1917

[…] La Federación de Trabajadores anárquico-colectivistas […] no espera ni quiere nada del Estado y sí de la organización de la clase trabajadora, organización distinta y opuesta a la de todos los partidos políticos; porque éstos aspiran a la conquista del gobierno y los anarquistas deseamos la abolición de todos los poderes autoritarios; y porque nos ofrecéis la mejora y nosotros queremos la completa emancipación del pueblo […]. Si aceptaseis el Pacto y la Federación como los aceptan los anarquistas, sería fácil entendernos para trabajar sin tregua ni descanso en pro de la única Revolución posible, […] la LIBRE FEDERACIÓN UNIVERSAL DE TODOS LOS MUNICIPIOS LIBRES.

Crónica de los Trabajadores de la Región Española, 1883.

Pablo Iglesias, fundador del PSOE, en una manifestación de trabajadores en Madrid, con motivo del Primero de Mayo

Pablo Iglesias, fundador del PSOE, en una manifestación de trabajadores en Madrid, con motivo del Primero de Mayo

“El marqués de Vegallana era en Vetusta jefe del partido más reaccionario entre los dinásticos […]. Tenía siempre un favorito que era el jefe verdadero. El favorito actual era […] ni más ni menos, don Álvaro Mesía, el jefe del partido liberal dinástico. El reaccionario creía resolver sus propios asuntos y en realidad obedecía a las inspiraciones de Mesía. Pero éste no abusaba de su poder secreto. Como un jugador de ajedrez que juega solo y lo mismo se interesa por los blancos que por los negros, don Álvaro cuidaba de los negocios conservadores lo mismo que de los liberales. Eran panes prestados. Si mandaban los del Marqués repartía estanquillos, comisiones y licencias de caza; pero cuando venían los liberales, el marqués de Vegallana seguía siendo el árbitro de las elecciones gracias a Mesía, y daba estanquillos, empleos y hasta prebendas. Así era el turno pacífico en Vetusta.

Leopoldo ALAS “Clarín”: La Regenta, 1884-1885.

Sagasta es paseado en triunfo sobre un embudo y va seguido de una procesión en la que desfilan todos los vicios electorales de la época. Caricatura de “La Carcajada”

Sagasta es paseado en triunfo sobre un embudo y va seguido de una procesión en la que desfilan todos los vicios electorales de la época. Caricatura de “La Carcajada”

La Asamblea adopta los siguientes acuerdos:

a) La política del actual Gobierno […] constituye a la vez un agravio al Parlamento y un obstáculo a que las ansias de renovación que siente el país puedan obtener normal satisfacción.

b) Que habiendo declarado el Gobierno y los partidos que tienen mayoría en las actuales Cortes, que éstas no pueden actuar en funciones de Constituyentes, y considerando la Asamblea que urge deliberar y resolver sobre la organización del Estado, la autonomía de los municipios y los demás problemas que las circunstancias plantean con apremio inaplazable para la vida del país, entiende que es indispensable la convocatoria de nuevas Cortes con funciones de Constituyentes […]

c) Que para que el país pueda manifestar libremente su opinión, y el pueblo no vea cerrada toda esperanza de que su voluntad sea conocida y respetada, las Cortes Constituyentes no puedan ser convocadas por un gobierno de partido, que fatalmente seguiría los habituales procedimientos de adulteración del sufragio, sino por un Gobierno que encarne y represente la voluntad soberana del país.

d) Que es indispensable que el acto realizado por el Ejército el día 1º de Junio vaya seguido de una profunda renovación de la vida pública española, emprendida y realizada por los elementos políticos; […]

El acto de Barcelona descrito por los parlamentarios. Narración expuesta en hoja clandestina por los asambleístas. (19 de julio de 1917)

Distribución de la afiliación obrera en España en 1917. Fuente: Artola (dir) Enciclopedia de Historia de España, vol. VI.

Distribución de la afiliación obrera en España en 1917.

Fuente: Artola (dir) Enciclopedia de Historia de España, vol. VI.

“Acta del distrito de Cazorla (Jaén)

Que en Villanueva del Arzobispo no se habían constituido las mesas a las siete y media de la mañana y que poco después observó el notario, al recorrer por segunda vez los colegios, que en varias urnas había un crecido número de papeletas y que el reloj de la plaza del pueblo estuvo parado, poniéndolo después en hora para falsear la elección.

Acta de distrito de Cangas (Oviedo)

Protesta de carácter general por la multitud de coacciones ejercidas por las autoridades administrativas; por la compra de votos y porque los Ayuntamientos retrasaron la formación de los repartos de consumos y las operaciones de quintas como amenaza a los electores”.

Jurisprudencia electoral del Tribunal Supremo, 1920

pau2001-4

[...] La Federación de Trabajadores anárquico-colectivistas [...] no espera ni quiere nada del Estado y sí de la organización de la clase trabajadora, organización distinta y opuesta a la de todos los partidos políticos; porque éstos aspiran a la conquista del gobierno y los anarquistas deseamos la abolición de todos los poderes autoritarios; y porque nos ofrecéis la mejora y nosotros queremos la completa emancipación del pueblo. [...] Si aceptaseis el Pacto y la Federación como los aceptan los anarquistas, sería fácil entendernos para trabajar sin tregua ni descanso en pro de la única Revolución posible, [...] la LIBRE FEDERACIÓN UNIVERSAL DE TODOS LOS MUNICIPIOS LIBRES.

Crónica de los Trabajadores de la Región Española, 1883.

Pablo Iglesias

Pablo Iglesias

El manifiesto de Sandhurst (19 de diciembre de 1874)

“Sólo el restablecimiento de la monarquía constitucional puede poner término a la opresión, a la incertidumbre y a las crueles perturbaciones que experimenta España. Dícenme que así lo reconoce ya la mayoría de nuestros compatriotas, y que mucho antes estarán conmigo todos los de buena fe, sean cuales fueren sus antecedentes políticos, (…).

Por virtud de la espontánea y solemne abdicación de mi augusta madre, tan generosa como infortunada, soy único representante yo del derecho monárquico en España. Arranca éste de una legislación secular, confirmada por todos los precedentes históricos, y está indudablemente unida a todas las instituciones representativas, que nunca dejaron de funcionar legalmente durante los treinta y cinco años transcurridos desde que comenzó el reinado de mi madre hasta que, niño aún, pisé yo con todos los míos el suelo extranjero.

Huérfana la nación ahora de todo derecho público e indefinidamente privada de sus libertades, natural es que vuelva los ojos a su acostumbrado derecho constitucional y a aquellas libres instituciones

(…)

No hay que esperar que decida yo nada de plano y arbitrariamente; sin Cortes no resolvieron los negocios arduos los príncipes españoles allá en los antiguos tiempos de la monarquía, y esta justísima regla de conducta no he de olvidarla yo en mi condición presente, y cuando los españoles están ya habituados a los procedimientos parlamentarios.”

pau2002-1