COCO LEGRAND

Origen e Inicio

Es hijo de José González Videla (Hermano de Don Gabriel, Presidente de Chile) y de Raquel Legrand. Estudió en el Liceo 7 de Ñuñoa, Santiago y quiso estudiar teatro, pero finalmente entró a Diseño en la Facultad de Bellas Artes de la Universidad de Chile. Estudió además en el Home Union College, en Kosciusko, Mississippi, Estados Unidos, donde se especializó en matricería. Volvió titulado y trabajó un año en las salas de prensa de los talleres que la marca francesa Citroën poseía en Arica, en el norte de Chile.

El humorista comenzó profesionalmente en 1970. Sus inicios fueron en la nortina y limítrofe ciudad de Arica. Allí mostró sus primeros trabajos y destacó de inmediato en calidad y por la variedad de sus personajes que fue introduciendo en rutinas que lo llevaron a ser conocido en un género tan difícil, cada cual con visos de la plena actualidad de acuerdo a la época.

En sus comienzos, recibió un respaldo muy positivo de parte de la crítica especializada y del público, pero a su vez el apoyo de un periodista que lo representó por varios años, Alfredo Lamadrid. Coco Legrand se trasladó a Santiago. Actuó en los más variados centros de espectáculos y fue así como se fue identificando con la juventud y con las mujeres y los varones de toda edad. Sus monólogos, chistes cortos, "cuentos" como él los llama, resultaron del agrado de moros y cristianos; también sus inigualables interpretaciones humorísticas de personajes "tipo" o típicos de cualquier estrato social chileno.

Sus presentaciones en el ya desaparecido teatro de revistas Bim Bam Bum en Santiago, resultaron memorables, de igual forma que las actuaciones en televisión y radio. La consagración definitiva de Coco Legrand llegó con su recordada presentación en el XIII Festival Internacional de la Canción de Viña del Mar, en 1972, con personajes, como el «Lolo Palanca» y «El Cuesco Cabrera». Su fuerte, desde los años 1980, fueron los café concerts, seis en total.

Tres de sus café concerts los llevó al fonograma: Con la camiseta puesta, No voten por mí y La década de un Coco. A ellos se añade el volumen A cantar con Coco Legrand.