Truco para calcular el día de la semana de cualquier fecha
Dominando lo que a continuación te cuento, siempre llevarás un calendario en tu mente y, de esta manera, podrás calcular el día de la semana de cualquier fecha en segundos.
Para ello, tienes que memorizar un código numérico de 12 dígitos de tal forma que cada dígito equivale a uno de los doce meses del año:
Para seguir con el truco debemos ahora realizar una serie de operaciones, pero para simplificar y facilitar el entendimiento del método vamos mejor a explicar el truco a través de un ejemplo: imaginemos que nos preguntan qué día de la semana fue el 24 de agosto de 1967, entonces procedemos de la siguiente forma:
24 – el día.
2 – equivalencia a agosto.
67 – dos últimas cifras del año
16 – parte entera de dividir 67 entre 4 (obtenemos así el número de bisiestos).
Sumamos estos 4 pasos: 24 + 2 + 67 + 16 y nos da 109.
Lo dividimos entre 7 y obtenemos un cociente igual a 15 y un resto de 4, que es el dato que nos interesa.
Ahora aplicamos la siguiente equivalencia:
Como nuestro resultado era un 4, esto implica que el 24 de agosto de 1967 fue un jueves.
Hasta aquí funciona para los años comprendidos entre 1900 y 1999. Para otros años tendremos que hacer un pequeño ajuste al resultado final:
Se ha incluido el año 0, aunque este año no existió, ya que antiguamente el cero no se usaba, así que ese año corresponde al año 1 antes de la era de Cristo.
En 532 d.C., Dionisio el Exiguo, un monje de origen sirio que vivía en un convento de Roma, matemático y teólogo, tras profundos estudios de la Biblia y de las fuentes históricas, llegó a la conclusión de que Jesucristo había nacido el 25 de diciembre del año 754 a.u.c., y propuso que dicho año fuera llamado 1 a.D. (anno Domini), es decir, el año 1 del Señor. El clero difundió rápidamente este sistema de datación, si bien su introducción oficial tuvo lugar en épocas muy distintas en cada país. Por ejemplo, Carlomagno decretó su uso el mismo año de su coronación, que, de 1554 a.u.c., pasó a ser el año 800 a.D.
Los eruditos siguieron usando el sistema a.u.c. para numerar los años hasta el 753 a.u.c. y, a partir de aquí, consideraban que empezaba la Era Cristiana, con lo que el año siguiente pasaba a ser 1 a.D. No fue hasta el siglo XVII que los historiadores empezaron a nombrar los años anteriores al 1 a.D. contando hacia atrás. Por aquellas fechas, el sistema de numeración arábigo estaba plenamente difundido y los matemáticos hacía mucho tiempo que manejaban con soltura los números negativos, pero parece ser que los historiadores no, lo que les llevó a cometer un crimen contra la humanidad: impusieron la costumbre de que el año anterior al 1 a.D, esto es, el año 753 a.u.c., pasara a ser el año 1 antes de Cristo, en siglas 1 a.C., tras el cual venía el año 1 a.D o, equivalentemente, el año 1 d.C. (año 1 después de Cristo). Dicho así puede sonar razonable, pero el crimen queda patente si miramos la tabla de conversión resultante:
¡No hay año cero! Este atentado contra el álgebra elemental puede inducir a mil equívocos y errores a quien no sea consciente de sus múltiples consecuencias. Por ejemplo, si la temperatura pasa de 4 grados bajo cero a 4 grados sobre cero el aumento ha sido de 8 grados, pero entre el año 4 a.C. y el año 4 d.C. no han transcurrido 8 años, sino sólo 7 (porque falta el año 0), tal y como se ve claramente si pensamos que estamos hablando de los años 750 a.u.c. y 757 a.u.c.
Para los meses de enero y febrero de años bisiestos (aquellos cuyas dos últimas cifras son múltiplo de cuatro) tendremos que restar un uno al resultado final.
Espero que te haya sido interesante este truco y ya sabes, con un poco de práctica y agilidad mental podrás sorprender a tus amigos con este método.