Presentación

En 1670, Richard Lassels, mentor de los primeros viajes de formación (Bildungsreise) de los jóvenes aristócratas ingleses por el continente, podía ponderar las ventajas de tal experiencia (Voyage or a Complete Journey through Italy) con una expresión que hoy nos recuerda inevitablemente las carreras ciclistas: “Sólo el que ha hecho el Grand Tour de Francia y el Giro de Italia está en condiciones de comprender a Julio César y a Tito Livio”.

Sin  embargo, este tipo de viajes, que dan comienzo en el siglo XVII y desaparecen en el siglo XIX, adquieren sus características paradigmáticas en el Setecientos, su época de mayor esplendor. El Grand Tour puede definirse como “un viaje iniciático que permite a los jóvenes aristócratas ampliar sus conocimientos políticos y sociales en diversos estados europeos (singularmente Francia) y artísticos y de cultura clásica en Italia”.

Del 15 de junio al 15 de septiembre de 2016

Sala hipóstila de la

Biblioteca Central

 

El Grand Tour es, por excelencia, un invento inglés, que luego sería copiado por jóvenes acomodados de otros países europeos, incluyendo España. Es un viaje de formación (un Bildungsreise), en que el protagonista viaja con un preceptor y un séquito de servidores durante un periodo medio de dos a tres años, recorriendo fundamentalmente (aunque no exclusivamente) diversas ciudades de Francia (París en primer lugar) e Italia (Florencia, pero sobre todo Roma y Nápoles), aunque también puede derivarse hacia Alemania y Holanda en la Europa del norte y llegar hasta Sicilia, Dalmacia (Split) y Grecia (Atenas) en la Europa del sur.

Grand Tour

Lunes a Viernes

 de 9:00 a 19:30 h

Para el marqués de Caraccioli, embajador del reino de Nápoles en Francia, París era en el siglo XVIII “le modèle des nations étrangères”. Un siglo antes, el pintor Nicolas Poussin, interrogado sobre las razones de su resistencia a regresar desde Roma a Francia, “se inclinó y recogió del suelo un poco de arena, mostrando a su interlocutor el polvo de pórfido y de serpentina que brillaba en la palma temblorosa de su mano”: ahí estaban Horacio y Tácito, la Antigüedad y su pasada grandeza, el culto nostálgico del paganismo, el retorno al clasicismo como ejemplo de belleza y como norma de vida.

ORGANIZACIÓN: Comisión de Actividades Culturales de la Biblioteca UNED

COLABORADORES: Marina Dolores Alfonso Mola, Julio López-Davalillo Larrea, Carlos Martínez Shaw, José Antonio Martínez Torres y Victoria soto (Facultad de Geografía e Historia)

Hildtrud Friederich-Stegmann  (Investigadora)

Servicio de Reprografía de la UNED

Servicio de Entornos Virtuales, Marketing y Comunicación con los Usuarios de la Biblioteca UNED 

DISEÑO: CINDETEC