Necesitamos educar para la paz con palabras y motivos, pero, sobre todo, pedirla y buscarla como don de Dios para cada persona y para el mundo entero. Os invito a leer esta pequeña oración de San Francisco de Asís por si nos sirve para situarnos en nuestras "batallas particulares", éstas podemos modificarlas, cambiarlas y transformarlas. Otras, por desgracia no.

“Señor, hazme un instrumento de tu paz:

donde haya odio, que ponga yo amor,

donde haya ofensas, que ponga yo perdón,

donde haya discordia, que ponga yo unión,

donde haya error, que ponga yo verdad,

donde haya duda, que ponga yo fe,

donde haya desesperación, que ponga yo esperanza,

donde haya tiniebla, que ponga yo luz,

donde haya tristeza, que ponga yo alegría.

San Francisco de Asís

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