Consumo de tabaco

Imagen obtenida de la página www.bohemia.cu

"No te das cuenta de lo esclavo que eres del tabaco hasta que un día intentas dejarlo"


La mayoría de la gente que consume tabaco, empezaron a hacerlo durante la adolescencia. Suelen hacerlo de manera inocente, pero en muchas ocasiones acaba siendo un problema a largo plazo.

El consumo de tabaco entre los jóvenes es preocupante, ya que el cerebro de un adolescente se encuentra todavía en desarrollo, y la nicotina tiene efectos en la áreas del cerebro que participan en las funciones emocionales y cognitivas.


Consejos para evitar que los adolescentes fumen:

1.- Da un buen ejemplo. Fumar en la adolescencia es más común cuando sus padres fuman. Si fumas, trata de dejarlo y explícale a tu hijo lo difícil que es dejar este hábito. Evita fumar delante de tus hijos y no dejes objetos relacionados con el tabaco en lugares visibles.

2.- Habla con tus hijos. Fumar durante la adolescencia puede ser una forma de rebeldía o una manera de encajar en un grupo de amigo. Habla con tu hijos sobre sus conocimientos del tabaco, pero no conviertas esta charla en un interrogatorio. Es importante explicarle cómo las compañías de tabaco, tratan de influir en las personas tratando de crear la percepción de que fumar es maduro o glamuroso. Recuérdale también que fumar da mal aliento, pone los dedos y los dientes amarillos y hace que la ropa y el pelo huela mal, además de poder dejarte una tos crónica u otras muchas enfermedades.

3.- Dile que no. A pesar de que consideres que a tu hijo le da lo mismo lo que le digas, tu desaprobación tendrá más impacto de lo que consideras, así que díselo de todos modos.

4.- Enséñale a decir que no. Es importante ofrecerle las herramientas que necesite para rechazar el tabaco. Puedes ensayar con él como manejar situaciones sociales difíciles para él. Podría ser tan simple como utilizar expresiones como: "No, gracias. No fumo".

5.- Haz las cuentas. Ayuda al adolescente a hacer las cuentas semanal, mensual y anual del consumo de tabaco. Una buena opción, podría ser comparar el costo de fumar con el de un móvil, ropa u otro artículo esencial para él. Fumar es caro.

6.- La adicción es un asunto serio. La mayoría de los adolescentes creen que fumar ocasionalmente, no les hará adictos, y que las cosas malas solo suceden a los demás. Recuérdale que la gran mayoría de los fumadores adultos empezaron en la adolescencia, y menciona a seres queridos, vecinos, amigos, que han tenido problemas relacionados con el tabaco, para que de este modo, tomen conciencia de la realidad.


No fumar es una de las mejores opciones para que un adolescente pueda gozar de una buena salud.