Autoestima

¿Cómo nos vemos a nosotros mismos?

Pensarás que es una sencilla pregunta, pero realmente no lo es. Es una cuestión extremadamente difícil de responder puesto que supone un encuentro con uno mismo que puede llegar a asustar.

Desde que nacemos nos enseñan y aprendemos muchas cosas que nos hacen evolucionar como personas. Aprendemos rutinas que interiorizamos de por vida sin cuestionarlas y que nos ayudan a relacionarnos de manera correcta y educada con otras personas. De la misma manera, aprendemos a querer al prójimo, en ocasiones de manera incondicional, y a no ser egoístas.

Pero… ¿alguien nos enseña a querernos y a gustaros a nosotros mismos? ¿Acaso ello puede ser señal del egoísmo tan habitualmente criticado por la sociedad?

Autoimagen, Autoconcepto y Autoestima son términos íntimamente relacionados que a veces nos llegan a confundir, puesto que no es fácil comprender las diferencias entre ellos.

La Autoestima es la que nos juzga de manera positiva o negativa. Nuestros sentimientos, la manera en la que nos relacionamos con el entorno, la confianza o inseguridad que tengamos, entre otros aspectos, dice mucho de ella.

Tener una buena autoestima es clave para comprendernos a nosotros mismos e incluso disculparnos ante determinadas situaciones en las que seamos capaces de reconocer nuestros errores e incluso aprender de ellos. Con una buena autoestima podremos afrontar los diferentes retos de la vida, defender nuestros derechos de manera asertiva o conseguir objetivos, entre otras muchas cosas.

Por todo ello, aprender a cuidar de nuestra Autoestima debería de ser asignatura obligatoria a lo largo de toda nuestra vida, no únicamente cuando somos niños.