COMPOSICIÓ GUANYADORA
¡LA CARTA CONTAGIADA!
Querido Presidente:
Soy el coronavirus. ¿Qué tal? ¿Cómo estás? Es broma, no me importa, y además sé que no me estás escuchado tampoco esta vez. Puede que no me notases los primeros 15 días pero estuve ahí, creciendo dentro de ti y dándote señales de que estoy aquí.
No me importas tú, ni quién eres. En realidad, solo espero las condiciones perfectas para tratar de existir y en algún momento tocaste algún micrófono contagiado o no te quedaste en confinamiento o simplemente tuviste mala suerte. Pero gracias por el ecosistema, amigo.
Ahora todos me ven como el malo de la película pero quiero aclarar que yo no elegí ser lo que soy, solo pasó y ya. Si te digo la verdad, nunca pensé que para vivir tendría que matar. Ya que así funciona, cuanto más crezco más mueres tú.
¿Pero sabes lo que en realidad me preocupa y me impactó sobre mi existencia? Es la compra compulsiva del papel del váter. Ahora a la gente le dices “coronavirus” y lo primero en que piensa es en el maldito papel de váter. Me preocupáis mucho, humanos.
Bueno, eso es todo lo que quería decirte y no te desesperes, eres joven y aún puedes ganar esta batalla, solo te deseo buena suerte.
Hasta pronto
El coronavirus
Chayma Tabouazat
El jurat valora: "Enhorabona. Destaquem el to irònic tan humorístic i intel·ligent utilitzat per fer referència a la situació actual amb tanta originalitat tant en el format com en el contingut".
COMPOSICIÓ FINALISTA
DON CARLOS
Suele decirse que en el mundo hay dos tipos de personas. Dos ejemplos son Víctor y Claudia, trabajadores en una residencia de Barcelona. Recientemente enterados de que el presidente pone en situación de confinamiento a la población debido al coronavirus. Claudia, un mujer de unos 36 años, bondadosa y con un carácter generoso. Aunque a veces puede ser algo exaltada dependiendo de la situación. Por otro lado está Víctor de 34 años. Una persona fría y con un carácter despegado y algo bohemio. Suele ceñirse a hacer solo lo suficiente que requiere su trabajo.
Ambos deben encargarse de un pequeño grupo de ancianos formado por 4 personas, una de ellas en cama y al parecer con una enfermedad respiratoria. Era conocido como Don Carlos y famoso por llevar ahí más de 10 años. Mientras Claudia saca a los pacientes de sus habitaciones y los acompaña a pasar el rato en la sala de estar, Víctor se encarga de limpiar cada una de sus habitaciones, reponer el papel higiénico y preparar la comida. Llegan las 12:00 y todos se sientan a comer, a excepción de Víctor, quien se dirige con bandeja en mano hacia la puerta de la habitación del paciente en cama. 30 minutos después sale con la misma bandeja, esta vez vacía. Lavó los platos, hizo la colada y limpió la mesa. Entonces llamaron a la puerta. Claudia fue a recibir a la persona, quien únicamente dejó una carta y se fue. Según la carta, Don Carlos debía ser llevado al hospital por sospecha del reciente coronavirus. Esa misma tarde se lo llevarian al hospital más cercano y el resto de ancianos y empleados serían sometidos a unas pruebas sobre un posible contagio. Después de leer la carta, Claudia fue a decírselo a Víctor.
Ambos entraron a la habitación de Carlos. Ligeramente más grande que el resto, paredes blancas y sin ventanas. Víctor, petrificado, y Claudia, aguantando las ganas de gritar al ver a Don Carlos muerto. “¿Por que debe ser así?” dijo uno. “Así debe ser” dijo el otro.
Alonso Paredes
El jurat valora: "Destaquem les descripcions, i la originalitat en l'ús de la dicotomia dels dos personatges, tot plegat amb molt tacte i filosofia".
Felicitem a tots els participants. Podeu veure la resta d'obres seleccionades pel concurs clicant AQUÍ.