Objetivo de aprendizaje 4

Mostrar compromiso y perseverancia en las experiencias de CAS

El cuarto objetivo de aprendizaje de CAS se enfoca en asegurar que los alumnos participamos regularmente en distintas experiencias de CAS y evaluar nuestro nivel de compromiso con cada una de ellas. La única forma de completar eficazmente un proyecto de CAS es con compromiso y perseverancia, por lo que considero que este objetivo fue alcanzado en todos mis proyectos, especialmente en los de mayor duración, como las tutorías y las clases de Francés. Sin embargo, nuevamente, las actividades mostradas en esta página son las que muestran el cumplimiento del objetivo más claramente.

ADOPTA UNA PLANTA

Desde hace algunos años, la contaminación es en uno de los principales problemas que enfrentamos a nivel mundial. En la actualidad la mayoría de personas entiende la magnitud del problema, pero, desafortunadamente, muchas personas creen que no pueden ayudar a resolverlo o no saben cómo. Una pequeña forma de hacer esto es plantando más, y ¿qué mejor motivación que el que te regalen una planta?

El proyecto Adapta una planta se basó en conseguir plantas y dejarlas en distintos lugares públicos en Chapala con letreros pidiendo a los visitantes que se las llevaran gratis para cuidarlas. Los lugares elegidos fueron el malecón y la plaza de Ajijic, la calle en la que se lleva a cabo el famoso tianguis semanal también en Ajijic, y el malecón de Chapala. En algunos de estos lugares, al llegar con plantas, personas se acercaron inmediatamente a averiguar qué pasaba y a llevarse las plantas. La duración de este proyecto fue de un mes en el que cada semana se dejaron pequeños grupos de plantas en distintos lugares.

Este proyecto está basado en un tema muy importante para mí al cual siempre he querido ayudar: el cuidado del medio ambiente. Sin embargo, en ocasiones me es difícil pensar en formas creativas de ayudar y de involucrar a la comunidad. Este proyecto cambió eso; aborda un tema de gran importancia global y crea un buen comportamiento de conocimiento y participación en la comunidad. Esta actividad me dio nuevas visiones y formas de abordar problemas. Además fomenta un hábito de cuidado al medio ambiente en mi comunidad, lo que ayuda a resolver un problema de relevancia global.

LA RELIGIÓN Y NUESTRO CONOCIMIENTO

Teoría del conocimiento es una de las clases más interesantes que tomamos como parte del Programa del Diploma de IB. Fue en esta clase que, cuando nuestro profesor, Rogelio Sánchez, nos sugirió llevar a cabo un proyecto en el que utilizaramos nuestros conocimientos de su clase y la de CAS, Gisela Aceves y yo decidimos unirnos para usar conceptos de CAS para aprender -por medio de la experiencia- más sobre un área de conocimiento: los sistemas religiosos de conocimiento. Gisela y yo queríamos evaluar por experiencia propia el impacto de la religión en nuestro conocimiento. Para esto, nuestra meta era participar en actividades de distintas religiones y evaluar el impacto de cada una en nuestra cultura general.

Para llevar a cabo este proyecto, Gisela y yo primero investigamos cuáles eran las religiones más practicadas alrededor del mundo y descubrimos que son el cristianismo, el islam, el hinduismo, el budismo, y el judaísmo. Después averiguamos si había lugares en nuestra zona donde se llevaran a cabo actividades de cada una. A nuestra sorpresa, estas religiones se encontraban mucho más cercanas a nosotras de lo que creímos inicialmente. Sin embargo, no todas las religiones de las que queríamos aprender aceptan a nuevos miembros que no buscan convertirse completamente a la religión, o algunos de los centros a los que queríamos ir sólo abren en ciertas épocas del año, por lo que mi compañera y yo sólo pudimos vivir dos de las cinco religiones que escogimos: el budismo y el cristianismo, aunque nos informamos sobre las cinco.

Por cinco semanas, Gisela y yo estudiaríamos las religiones elegidas, una cada semana; durante ésta nos informaríamos lo más posible sobre una religión y el fin de semana iríamos a un lugar de su práctica. La primera semana nos dedicamos al cristianismo, ya que es la religión más popular a nuestro alrededor y una de la que las dos hemos formado parte anteriormente. Al vivir en un país en el que más del 80% de la población es cristiana, fue muy fácil para Gisela y para mí asistir a misa un domingo. Las dos ya hemos hecho esto muchas veces antes; incluso hemos participado en actividades católicas como la primera comunión y la confirmación, pero decidimos ir a misa para recordar la experiencia y completar nuestro proyecto de mejor manera.

La segunda semana Gisela y yo estudiamos el budismo. Al llevar a cabo nuestra investigación nos dimos cuenta de que esta religión no era lo que esperamos. Mi compañera y yo estábamos acostumbradas al cristianismo por lo que el budismo nos pareció algo muy diferente, pero nos gustó mucho a las dos*. El fin de semana, las dos fuimos a un centro de meditación budista muy cerca de mi casa, donde participamos en una meditación de 60 minutos y una reflexión al final de los miembros de la religión sobre como ésta los ha ayudado a superar problemas personales y a alcanzar un mayor nivel de felicidad. A Gisela y a mí nos encantó esta experiencia e incluso decidimos regresar en otras ocasiones. Desde hace años he encontrado que no estoy de acuerdo con muchas de las cosas relacionadas al cristianismo, por lo que dejé de ser parte de cualquier religión, pensando que todas serían iguales. El budismo me mostró algo muy diferente a lo que pensaba; esta religión no se basa en el miedo de las personas hacia un Dios, en cambio sólo busca darle a las personas una forma de alcanzar la felicidad total.

La tercera semana nos informamos sobre el judaísmo, del que también ya sabíamos un poco. Sin embargo, nos enteramos de que no podíamos asistir a su templo sin ser miembros de la religión, por lo que Gisela y yo decidimos únicamente ir a verlo el fin de semana sin participar en sus actividades. La cuarta semana nos pasó algo similar. Fuimos a Guadalajara a buscar un centro de Islam, pero nos enteramos de que las personas de la religión se unían en ese lugar únicamente a finales del mes de mayo, una fecha en la que Gisela y yo no podríamos participar antes de terminar el proyecto. Pero tal vez vayamos algún día como proyecto personal ya que mi compañera y yo estamos muy interesadas y dedicadas a nuestra meta de vivir en distintas religiones. Finalmente, la quinta semana Gisela y yo buscamos un lugar dónde practicar hinduismo, pero lo único que pudimos encontrar fueron lugares de masajes, por lo que tuvimos que quedarnos únicamente con la información que habíamos encontrado en línea de la religión.

Este proyecto es uno de mis favoritos de todo mi curso de CAS. Me gusta mucho estar informada sobre distintas culturas e ideas, por lo que se me ocurrió aprender sobre distintas religiones e invité a una de mis mejores amigas a vivir la experiencia conmigo. Esta actividad, a pesar de que no fue completada como se planeó originalmente, me enseñó que todas las religiones son muy distintas entre sí y que todas se encuentran más cerca de lo que pensé. Aprendí a ver las cosas que suceden a mi alrededor desde distintas perspectivas y ahora entiendo un poco más sobre la cultura de países donde la religión dominante es una de las cinco que estudié en este proyecto. Este proyecto me enseñó mucho y me pareció muy interesante poder vivir y aprender religiones completamente distintas a la que conocía y me gustaría en el futuro poder completar la actividad y participar en actividades de las religiones que nos faltaron a Gisela y a mí.

*Gisela y yo creamos un escrito donde exponemos toda la información que encontramos sobre cada religión, nuestra experiencia con ellas y el impacto que nosotras encontramos de cada una a nuestro alrededor.

**Este proyecto incluye conceptos de nuestra clase de Tdc, pero no fue entregado para obtener una calificación en esa clase. El proyecto es únicamente de la clase de CAS.