Porque… ¿A quién no le gusta un buen chuletón? Pues lo cierto es que la mayor parte de grasas provienen de ahí, de los productos cárnicos, que a su vez van seguidos de los lácteos. Un gran consumo de carne equivale a tener un gran consumo de grasas y proteínas que, como todo, en exceso no es bueno.
Estos productos, que salen más baratos, tienen una razón para serlo: su mala calidad, que se debe a las malas condiciones de estos animales en lugares como las macrogranjas. Así, el hecho de tener un gran consumo de carne se debe a que la población general prefiere precio y no calidad..