Complejo Volcánico Santa María- Santiaguito desde el sureste. En primer plano el Domo Caliente con una explosión. En segundo plano la cara suroeste del volcán Santa María con el escarpe del cráter de la erupción de 1902.
El complejo volcánico Santa María-Santiaguito está ubicado 12 km al suroeste de la ciudad de Quetzaltenango, al occidente de la Cordillera Volcánica de América Central en Guatemala, producto de la subducción de la placa de Cocos bajo la placa del Caribe. Es uno de los volcanes más activos del país, de Centroamérica y del mundo, por su continua actividad asociada al crecimiento de domos. Junto a los volcanes de Fuego y Pacaya, está catalogado como un volcán de muy alta amenaza en el ranking de peligrosidad volcánica de Guatemala, elaborado por el Instituto de Vulcanología, Sismología, Meteorología e Hidrología (INSIVUMEH, 2020).
El complejo está formado por el estratovolcán Santa María, situado en las coordenadas 14º 45’ 23’’ N y 91º 33’ 06’’ W, con una altura de 3,772 msnm y cuya última erupción en 1902 provocó el colapso de su porción sur y suroeste. El complejo también incluye el conjunto de cuatro domos que de oeste a este son el Brujo, el Monje, la Mitad y el Caliente, este último situado en las coordenadas 14º 44´ 33̏ˮ N y 91º 34͗ 13ˮ W con 2,570 msnm. Los domos del volcán Santiaguito y específicamente el domo Caliente han presentado continua actividad desde el inicio de su formación en 1922, con el emplazamiento de flujos de lava, explosiones acompañadas de gases y cenizas, la generación de caídas y avalanchas de rocas y de flujos piroclásticos (corrientes de densidad piroclástica), así como de flujos de lodo y escombros, conocidos como lahares, por la removilización del material piroclástico durante la época de lluvias. Esta continua actividad afecta frecuentemente las actividades agrícolas de la zona y la movilidad de las personas por el impacto en vías de comunicación. Los eventos de mayor magnitud han producido en el pasado reciente impactos de consideración en diversas poblaciones asentadas al sur del volcán, por lo que esta zona es considerada de alto riesgo.
Vista del cráter y escarpe remanente en el flanco suroeste del volcán Santa María, producto de la erupción de 1902.
El volcán Santiaguito es un complejo de domos que ocupan el cráter del volcán Santa María formando durante su violenta erupción en el año de 1902. Alineados de Este hacia Oeste, los domos reciben los nombres de Caliente, La Mitad, El Monje y El Brujo. El domo Caliente, es conocido como Santiaguito por la población local y el público en general, fue el primero de los domos en formarse a partir del año 1922, y se ubica en el suroeste del cráter del volcán Santa María. A partir de 1939, el centro eruptivo migra hacia el oeste, y se forman los domos La Mitad (1939-1942), el Monje (1949-1958) y el Brujo (1958-1972). A partir de1977, la actividad se concentra exclusivamente en el Domo Caliente. Desde entonces la actividad volcánica consiste en degasificación constante de vapor de agua y otros gases magmáticos, explosiones con vapor, gases y ceniza, emisión de flujos de lava en bloques, formación de domos y caídas de rocas, avalanchas, y corrientes de densidad piroclástica. Las corrientes de densidad piroclástica son producidas tanto por colapsos parciales de la cúpula del domo, como por el colapso del frente de los flujos de lava. Durante las explosiones y el emplazamiento de las corrientes de densidad piroclásticas se detecta la dispersión de ceniza a favor de la dirección del viento y zonas próximas a los domos. La ceniza y los bloques de roca acumulados en los flancos del domo Caliente y en la planicie que se extiende entre los domos y la pared del Santa María son removidos por las lluvias en forma de flujos de lodo y escombros denominados lahares, los cuales descienden por los cauces de los ríos hacia el sur del volcán Santiaguito.
Las principales erupciones.
El 2 de noviembre de 1929 ocurre un colapso parcial del domo Caliente generando flujos piroclásticos que se desplazaron a lo largo del río Tambor y alcanzaron una distancia de más de 10 kilómetros hacia el sur. Se estima que hubo más de 5000 personas fallecidas por este evento. Este es el evento de mayor magnitud registrado en la historia eruptiva del Santiaguito. y fue acompañada por la emisión de flujos de lava. Posteriormente, en abril y septiembre del1973, durante la emisión de flujos de lava en los domos Caliente y Brujo, se dieron dos colapsos , generando el descenso de corrientes de densidad piroclástica en los cauces de los ríos Nimá II y Concepción Ambos flujos recorrieron entre 3 y 4 kilómetros de distancia y estuvieron acompañados por la emisión de flujos de lava que alcanzaron con longitudes desde cientos de metros hasta 3.5 kilómetros. Entre el 1977 y el año 2000, el evento de colapso parcial más relevante sucedió el 19 de julio de 1989, provocando el descenso desde el domo Caliente de corrientes de densidad piroclásticas que se extendieron por lo menos 5 Años más tarde, durante el 2010, aumentó la actividad extrusiva en el domo Caliente, se observaron cambios visibles en la morfología del domo y el incremento en la generación de flujos piroclásticos a lo largo del cauce del río Nimá II. El 9 de mayo del 2014 ocurre la erupción de mayor magnitud después del evento del 1929. La actividad inicia con el colapso parcial del domo hacia el flanco oriental y el emplazamiento de fcorrientes de densidad piroclástica a lo largo del río Nimá I hasta una distancia de 8 km. Después del evento inicia la extrusión de un derrame de lava desde la cicatriz del colapso, que avanza a lo largo del río Nimá I hasta una distancia de 4 km. Durante esta erupción ocurren numerosas explosiones con la formación de columnas eruptivas hasta 5000 msnm y la generación de de corrientes de densidad piroclástica de 3 km de longitud. Desde 2016 y hasta finales del 2019 la actividad registra un decremento en cuanto a número de explosiones. En el 2020 se incrementa la actividad extrusiva hacia el flanco suroeste del domo Caliente, con múltiples explosiones que disminuyen durante el 2021. En enero 2022 se registra un incremento en las explosiones y el 28 de este mes se produce el colapso del frente de lava en el flanco oeste, con la formación de una corriente de densidad piroclástica por la barranca del río San Isidro hasta una distancia de 3 km. Esta actividad representa el escenario de menor magnitud, pero frecuentemente observado durante las etapas de extrusión y crecimiento de domos y derrames de lava.
Cicatriz de decenas de metros de profundidad en la cúpula del domo Caliente generada por la erupción explosiva de 1929 (Fotos de J Schwendener y F. Termer, año desconocido, cedidas por William Rose).
Explosión moderada en el domo del volcán Santiaguito de coloración gris oscuro, lo que indica la carga de ceniza que arrastra hacia la atmósfera. Las explosiones producen también desprendimientos y avalanchas de rocas desde la cúpula del domo.
Aldea Loma Linda, situada a 6.5 km al oeste del complejo de domos Santiaguito, en la dirección preferencial de los vientos en la zona, por lo que está altamente expuesta a la caída de ceniza. De forma frecuente los techos de las casas, patios y vegetación quedan cubiertas por la ceniza emitida por las explosiones continuas en el domo Caliente
Efectos del paso del lahar ocurrido en el 1983 en la aldea Viejo Palmar.
Avance de un lahar por el cauce del río Nimá II en 2014.
Puente Castillo de Armas en Retalhuleu, paso de la carretera CA2 sobre el río Samalá, donde se puede observar el continuo asolve por el paso de lahares..
En el volcán Santiaguito los lahares son eventos muy comunes durante la temporada de lluvias, que se extiende anualmente de junio a octubre y que cada año registra un promedio de 3000 mm de lluvia acumulada. Por lo tanto, es una zona muy susceptible a procesos de erosión fluvial. Las lluvias están caracterizadas por diferentes tipos de eventos meteorológicos. Por un lado, están las lluvias localizadas en uno de los flancos del volcán, que son de corta duración y alta intensidad, con la acumulación de 40-60 mm de lluvia en promedio en pocas horas. Por otro lado, están eventos extremos por el ingreso de huracanes, con lluvias de duración de varios días y la acumulación de hasta 400 mm de lluvia.
Cada temporada de lluvias se registran decenas de eventos de lahar de diferente magnitud a lo largo de los principales ríos y barrancas que surcan el domo Caliente y constituyen su red de drenaje que fluye hacia el sur: río Tambor, río San Isidro, río Nimá Primero, río Nimá Segundo, río Cabello de Ángel y río San José. A una distancia de 6 km al sur del domo Caliente, los ríos Nimá Primero, río Cabello de Ángel y río San José confluyen en un único drenaje que se conecta aguas abajo al río Samalá, a una distancia de 10 km del domo.
Las barrancas que descienden del volcán han sufrido importantes cambios en su curso y morfología, debido tanto al emplazamiento de flujos de lava en sus partes altas, como al emplazamiento de depósitos de corrientes de densidad piroclástica y lahares. La emisión de derrames de lava obstruye la zona de recarga de las barrancas, por lo que no siempre estas son activas en la generación de lahares. Esta situación ocurrió, por ejemplo, después de la actividad eruptiva de mayo de 2014 y asociada al emplazamiento de un flujo de lava en el flanco oriental del domo Caliente entre enero y junio de 2022. Actualmente, después del emplazamiento de este derrame de lava, los drenajes activos en la formación de lahares son el río Cabello de Ángel y el río Nimá Primero, que desembocan en el Río Samalá.
Los efectos de los cambios morfológicos y la elevada cantidad de material piroclástico en la parte alta de las cuencas, genera una dinámica muy activa y cambios morfológicos importantes también en zonas intermedias y bajas. El ancho y profundidad de los canales varía en función de la sedimentación de los materiales que son transportados por los lahares. En periodos de alta frecuencia de lahares ocurre el relleno de las barrancas y la inundación de terrazas, especialmente aquellas que dividen una barranca de otra o las localizadas en zonas de curvaturas de los ríos. Estas etapas de relleno pueden ser seguidas por etapas en donde domina la erosión que modifican los bordes y ancho de los canales.
El evento de lahar más catastrófico registrado en el área de influencia del volcán Santiaguito es el lahar ocurrido el 4 de julio del 1983, que descendió por los cauces de los ríos Nimá Primero y Segundo provocando la destrucción de la aldea El Palmar y obligando a su reubicación posterior en el Nuevo Palmar.