COLECTIVOS DE CICLISTAS PROPONEN MODIFICACIONES A LA LEY DE LA BICICLETA

Fotografía: Isaura Toro Merida

Periodista: Irasema Rodríguez Flores

La comunidad ciclista de Cochabamba planteó varias modificaciones de contenido y de ejecución de la Ley de la Bicicleta por ausencia de especificaciones conceptuales, mecanismos de financiamiento, denuncia, incentivo y sanciones.

En agosto de 2017, el Gobierno Autónomo Municipal de Cochabamba promulgó la Ley No 221 de la bicicleta, que tiene por objeto la promoción del uso de la bicicleta, como medio de transporte alternativo, no motorizado, preferencial, de interés público y en condiciones de seguridad.

En la ciudad, el país y el mundo existe un marco normativo que instaura la promoción de la infraestructura y los servicios de transporte sostenible, con la finalidad de mitigar los impactos negativos para la salud y el medio ambiente local y global. Así, las naciones que mayores logros han tenido sobre la planificación, regulación y promoción del uso de la bicicleta como medio de transporte, a nivel mundial y continental, son Holanda y Colombia.

Un estudio de la Universidad Católica de la Santísima Concepción de Chile, refiere que entre las estrategias adoptadas por Holanda se encuentran: un marco nacional con una política pública para el uso de la bicicleta, leyes de tránsito y seguridad vial que incluyen a la bicicleta como un tipo de transporte, normas que refuerzan la seguridad de los ciclistas, creación de más y mejores instalaciones de aparcamiento para bicicletas, reforzamiento de los enlaces más débiles de la red ciclística y la incorporación de nuevas personas al uso de la bicicleta. Por su parte, Colombia cuenta con un Código de Transporte Terrestre resaltando las cualidades y características especiales de los ciclistas frente a las de conductores y motociclistas; regula las ubicaciones de las placas únicas para motocicletas, motociclos, bicicletas y otras especificaciones conceptuales claras.

En nuestro país, existen normativas que coadyuvan a la visibilización de la bicicleta, la protección del medio ambiente y de la salud, pero que no son conocidas por la mayoría de la población como la Ley No 150/2011 del Día Nacional del Peatón y del Ciclismo en Defensa de la Madre Tierra, la Ley No 379/2016 de Implementación y Promoción de la Ciclovía Recreativa Dominical “El Alto a Todo Pedal” , el Reglamento Municipal de Transporte No Motorizado de La Paz y la Ley No 221/2017 de la Bicicleta de Cochabamba.

Sobre la Ley No 221, el abogado ambientalista, Patrik Reyes, señaló que la fortaleza de esa normativa es que visibiliza el segmento poblacional que utiliza un medio de transporte no contaminante, y, la debilidad radicaría en la aplicabilidad de la misma, dado que falta una educación vial eficiente y exigible a todos los conductores de vehículos motorizados, en especial a los conductores de transporte masivo porque generan peligro constante a los ciclistas.

“Como toda ley, la misma es perfectible, y debe ser adecuada conforme se vaya desenvolviendo la misma ciudad; En el principal aspecto que deben trabajar las autoridades responsables en coordinación con la Dirección de Tránsito, es en socializar y educar a los conductores de motorizados”, acotó Reyes.

Por su parte, Rodrigo Solares, miembro del colectivo Masa Crítica “Kanata”, expresó: “Las observaciones a la Ley de la Bicicleta son muy variadas, por ejemplo, hay algunas de contenido como la falta de tipificación de infracciones de conductores, invasores, y, hay otras de ejercicio, como la no implementación de parqueos para bicis que debió realizarse hasta dos años después del lanzamiento de esa normativa”.

A tiempo de compartir el borrador de las propuestas para la mejora de la Ley No 221 con el equipo de Un Par de Ruedas, Solares anunció que también se plantearán mejoras del Reglamento de la mencionada norma ante el Comité Municipal de Promoción del Uso de la Bicicleta.