Revisión periódica del grado de implementación de las acciones previstas en el Plan Digital.
Análisis de la adecuación de las actividades al contexto del centro y a las características del alumnado.
Seguimiento mediante reuniones del equipo directivo y la comisión digital para valorar avances, dificultades y propuestas de mejora.
Encuestas al profesorado, alumnado y familias sobre la utilidad, pertinencia e impacto de las herramientas digitales aplicadas.
Cuestionarios online para valorar la integración de TIC en el proceso de enseñanza-aprendizaje.
Registros de uso de plataformas digitales (Aula Virtual, REA, recursos colaborativos).
Diarios de aula y actas de coordinación docente, donde se recoja evidencia del uso de metodologías digitales.
Se definen para cada línea de actuación del PDC. Ejemplos:
% de profesorado que incorpora las TIC en sus programaciones.
Nº de actividades con TIC realizadas por ciclo o etapa.
Nivel de participación del alumnado en entornos virtuales de aprendizaje.
Grado de satisfacción de la comunidad educativa (medido en encuestas).
Uso de herramientas digitales para la evaluación, la retroalimentación y la coevaluación.
A partir de los resultados obtenidos en los indicadores, se elaborará un informe anual que recoja:
Avances logrados en competencia digital docente y del alumnado.
Dificultades detectadas y necesidades de apoyo técnico o formativo.
Acciones de mejora a implementar en el siguiente curso.
Incluirá los resultados de los indicadores de calidad, el análisis de encuestas y cuestionarios, así como las propuestas de mejora.
Será presentada al Claustro y al Consejo Escolar, para su validación e incorporación a la memoria final del curso.
✅ De esta manera, el plan no se queda solo en la implementación, sino que entra en un ciclo de mejora continua, asegurando que el centro evoluciona en competencia digital cada curso.