Más de 110 millones de niños en el mundo, dos terceras partes de los cuales son niñas, no van a la escuela.
– De los 875 millones de personas analfabetas que hay en el mundo, dos terceras partes son mujeres.
– La mitad de las niñas que viven en países en desarrollo estarán casadas cuando cumplan 20 años.
Si las mujeres pudieran estudiar se reduciría la muerte infantil, mejoraría la calidad de vida tanto de los niños como de las mujeres, podrían acceder a puestos de trabajo, se reduciría las bodas infantiles, etc.
# MÁS EDUCACIÓN >>>>> MEJOR ALIMENTACIÓN Y SANIDAD, MENOR BRECHA SALARIAL, MEJORES PUESTOS DE TRABAJO, MEJOR ECONOMÍA, MAYOR DESARROLLO….
La educación de la madre es fundamental para su propia salud
Si todas las madres completaran la enseñanza primaria, la mortalidad materna podría reducirse en dos tercios, con lo que se salvarían 98.000 vidas. En el África subsahariana, si todas las mujeres completaran la enseñanza primaria, la mortalidad materna podría reducirse en un 70%, con lo que se salvarían 50.000 vidas.
La educación de las niñas puede salvar millones de vidas
Si todas las mujeres recibieran instrucción primaria, habría un 15% menos de mortalidad infantil. Si todas las mujeres recibieran educación de nivel secundario, la mortalidad infantil se reduciría a la mitad, con lo que se salvarían tres millones de vidas.
La educación de las madres mejora la alimentación infantil.
Si todas las mujeres recibieran instrucción primaria, 1,7 millones de niños se salvarían del raquitismo y la desnutrición. Si todas las mujeres recibieran educación de nivel secundario, 12 millones de niños se salvarían del raquitismo y la desnutrición.
Las niñas que reciben más educación tienen menos probabilidades de llegar a ser madres precoces.
El número de menores de 17 años de edad que quedan embarazadas en el África subsahariana y Asia occidental se reduciría en un 10%, si todas las muchachas completaran la enseñanza primaria. El número de menores de 17 años de edad que quedan embarazadas en el África subsahariana y Asia meridional y occidental se reduciría en un 60%, si todas las muchachas completaran la enseñanza secundaria.
La educación de las niñas es un factor decisivo para acelerar la transición demográfica y lograr tasas de natalidad más bajas.
En el África subsahariana, las mujeres que no han recibido instrucción tienen, en promedio, 6,7 hijos. Esta cifra se reduce al 5,8 en el caso de las que han cursado la enseñanza primaria y disminuye a menos de la mitad, a 3,9, entre las que han completado la enseñanza secundaria.
Las muchachas que alcanzan niveles de educación más altos tienen menos probabilidades de contraer matrimonios precoces.
Si todas las muchachas completaran la enseñanza primaria, los matrimonios precoces disminuirían en un 14% Si todas las muchachas completaran la enseñanza secundaria, los matrimonios precoces disminuirían en dos tercios.
La educación reduce las diferencias de salario entre hombres y mujeres.
En Pakistán, las mujeres que han cursado la enseñanza primaria ganan el 51% de lo que perciben los hombres. Las que han completado la secundaria, ganan el 70% de lo que perciben los hombres. En Jordania, las mujeres que han cursado la enseñanza primaria ganan el 53% de lo que perciben los hombres. Las que han completado la secundaria ganan el 67% de lo que perciben los hombres.
Las mujeres instruidas tienen más probabilidades de hallar un empleo.
En Brasil, sólo el 37% de las mujeres que no completaron la enseñanza primaria han encontrado trabajo. La cifra aumenta al 50% entre las que terminaron la primaria y al 60% entre las que completaron la escuela secundaria.
“Solía ir a la escuela primaria aquí en Tudun Kose, pero ya soy demasiado mayor y mi familia no tiene suficiente dinero para enviarme a la escuela secundaria, que está muy lejos. También me están preparando para casarme pronto. Hay algunos muchachos que le han preguntado a mi padre si pueden casarse conmigo, pero todavía no hay nada decidido. Cuando veo que otras muchachas van a la escuela, me siento feliz por ellas y las admiro. Un día las seguí hasta la escuela, pero el maestro me dijo que era demasiado mayor y tuve que irme”.
Sakina, 12 años, noroeste de Nigeria
“Las mujeres siempre tenían que pastear ovejas. Mi mamá no tiene la educación primaria y apenas sabe escribir su nombre. Mis padres decían: -¿Para qué vamos a hacer estudiar a las mujeres?- Yo entendí entonces que debía ser así y salí contenta de poder pastear ovejas al año siguiente”.
Elvira Noa Quispe, Quispicanchi, Perú
“No podemos enviar a nuestras jóvenes a aldeas lejanas para estudiar, ya que no es seguro viajar tres o cuatro kilómetros a pie. Nazma es una chica inteligente y me siento mal cuando veo que mi hija quiere ir a la escuela, pero no puedo hacer nada”.
Maulvi Iqbal Khan, Mewat, India33
“Soy muy feliz por haber vuelto a la escuela. Tengo el uniforme del año pasado que todavía me sirve, pero mi madre no puede comprarme libros de ejercicios. Sin los libros no podré escribir, sólo leer y tardaré más en aprender.
Vivo con mis dos hermanos pequeños, mi abuela y mi madre. Mi padre ha muerto y mi madre no tiene trabajo. Hay días que no tenemos comida y eso es duro, no hay dinero para comprar nada. A veces voy a la escuela con hambre, pero ahora nos dan dos comidas gratis en la escuela. Las gachas de la mañana y la comida del mediodía nos llenan y así aprendemos mucho mejor. La asistencia a la escuela ha aumentado mucho.
Maua Juma, 11 años, Tanzania
“Mi nombre es Arpita y tengo 9 años. Vivo con mis padres y mi hermana Ananna. Mis amigos se llaman Sajid y Konika. Nos gusta jugar juntos.
Durante el dia, Sajid y Konika van a la escuela. Yo me quedo en casa y ayudo a mi madre a dar de comer a los pollos, limpiar el patio y recoger el agua. Mi madre me está enseñando también el alfabeto en bengalí y en inglés para que algún día pueda aprender a leer.
Me gustaría ir a la escuela y pasarlo bien allí con mis amigos. Pero si no puedo ir seguiré aprendiendo con mi madre en casa. Cuando sea mayor me gustaría ser médico o ayudar de alguna manera a la gente y ser capaz de cuidar de mí misma”.
Arpita, Bangladesh