Otros tipos de inflación

Lo primero, recordemos cómo se calculaba la inflación. Por eso, obligatoriamente debes pinchar en el botón "Recordemos".

IPC armonizado

El primer paso que dimos para calcular el IPC era la cesta del consumidor medio español. Obviamente, ésta va a diferir en cuanto a su composición de la cesta del consumidor medio sueco o alemán. No compramos habitualmente las mismas cosas. Seguro que los suecos incluyen los arenques ahumados y los alemanes las salchichas pero no el jamón serrano o el aceite de oliva.

Es por ello, que en la Unión Europea se calcula este índice para poder comparar entre los países que la integran. Y, es que, la política monetaria (como estudiarás más adelante) es común en la Eurozona, luego los indicadores deben serlos también.

La inflación subyacente

Este tipo de inflación no tiene en cuenta los componentes más inestables como el petróleo. Se utiliza para medir la evolución de los precios a largo plazo.

El precio del barril de petróleo es muy variable, tan pronto sube un montón como baja y, es que, viene marcado por los intereses de los países que lo producen. Al ser un bien tan importante en la base de cualquier economía sus vaivenes provocan enseguida golpes inflacionistas (si sube la gasolina, el transporte se encarece y la producción también, y estas subidas se trasladan a los precios de venta). Es, por ello, que se aparta del dato de inflación para hacer estudios en el tiempo.

Existen más tipos de inflación, pero no se estudian en esta asignatura.