Capítulo 2

18. 7. 1990, temprano en la mañana

Bajo la disuasión de Rhine, abandoné temporalmente la inspección del tritón. Sin embargo, según datos conocidos, los sirenios, como los delfines, pertenecen a los mamíferos con alto intelecto. Cuando son capturados y encarcelados sin medidas de seguridad eficaces, estas criaturas pueden luchar de la manera más extrema para oponerse. Por ejemplo, el suicidio.

Este tritón es demasiado valioso, así que nunca podré permitir que su vida se vea amenazada...

Incluso si eso significa arriesgar mi propia vida.

Escribí en mi diario un trazo a la vez con una determinación tan firme como los afilados rastros de la tinta. Mi mente todavía parecía merodear en las oscuras pupilas de los ojos del tritón.

Aún quedaban vestigios de escalofríos en mi espalda, no podía quitármelos de encima.

Antes de que amanezca, quiero comenzar a diseñar un plan de domesticación, tal como tratamos a los delfines salvajes. Aunque actualmente somos incapaces de determinar qué tan alto es el CI del tritón, aun así, me gustaría tratar de comunicarme con él, esperando que pueda relajar su guardia hacia mí.

Toc, toc, toc.

De repente golpearon la puerta. —¿Desharow?

Esa era la voz de Rhine. Cerré el diario de golpe y lo metí dentro de la costura abierta de la cama para evitar que lo descubriera. Si Rhine alguna vez se entera de este plan, definitivamente me detendría. Rhine siempre ha creído que los sirenios son criaturas naturalmente sanguinarias, que son tan salvajes como los tiburones blancos y solo pueden ser observados de una manera cerrada. Sin embargo, Rhine es mi mentor, sus logros en la investigación de biología mítica son muy superiores a los míos. Ni siquiera yo podría persuadirlo para que abandonara esa idea.

Justo después de que el diario fuera ocultado, Rhine abrió la puerta. Simplemente me volví a inclinar sobre la cama y, con mis ojos entornándose, miré su figura entrante antes de cerrarlos con fuerza para asumir una cara profundamente dormida.

Se agachó, su sombra cayó desde el aire. —Deja de fingir que duermes, acabo de escuchar el ruido de ti subiéndote a la cama.

Cerré los ojos y lo ignoré, fingiendo sueño profundo y chasqueando los labios como si estuviera en un estado de ensueño. Sin embargo, por un momento, pareció estar esperando pacientemente, pero después agarró mi mano herida. Cuando me estaba preguntando qué iba a hacer, sentí algo frío y un golpe de dolor ardiente se precipitó inmediatamente dentro de mi cuerpo. ¡Casi saltando de la cama, abrí los ojos y vi que este hombre estaba untando una bola de algodón cubierta de alcohol!

—Qué odioso, prácticamente estás tratando de matarme de dolor, ¿no es así?

Lo fulminé con la mirada y mostré mis colmillos, pero mi brazo fue inmediatamente asido con un fuerte agarre. No se molestó en mirarme, pero sus cejas se levantaron descuidadamente para mostrar un indicio de siniestro triunfo, frotando mi herida con lentitud. Apreté los dientes, fingiendo indiferencia ante el dolor, pero el sudor apareció sobre mi frente. A Rhine le encantaba hacerme pasar malos ratos. Es, literalmente, uno de sus mayores entretenimientos en esta larga y aburrida travesía marítima.

Pervertido irascible, maldije en silencio.

La bola de algodón finalmente se retiró, mis ojos se oscurecieron. Me incliné sobre la cama con alivio, pero desafortunadamente, Rhine todavía me estaba agarrando la mano. En lugar de soltarme, me acercó hasta el punto donde sus labios casi tocaron la punta de mi nariz. —No te arriesgues a acercarte al tritón a mis espaldas, Desharow —murmuró—. La inquietud enterrada en lo profundo de tus huesos está surgiendo de nuevo, ¿cierto? Me di cuenta de que algo andaba mal solo por la mirada en tus ojos hoy.

Me tomó por sorpresa, haciéndome sentir un sudor frío al instante. Mi nariz fue completamente invadida por el olor a cigarrillo en su cuerpo, incluso causando que mi respiración se volviera vaga. —No, después de experimentar su ataque, ya sé cuán agresivo puede ser ese tritón. Además, también soy el tipo de persona que le teme al dolor y a la muerte.

Le mostré la mano herida que fue frotada hasta quedar roja, y lo miré con auténtico miedo, pero mi conciencia culpable ya estaba reculando en mi garganta.

La manzana de Adán de Rhine subió y bajó ante mis ojos, su nariz dejó escapar un resoplido. —Tú, Desharow, un amante de las aventuras... ¿le teme a la muerte?

Asentí rápidamente con la cabeza.

Su mano al fin me liberó y solté un suspiro de alivio. Pero entonces mi espalda fue inmediatamente agarrada por su otra mano y, con su cuerpo mucho más fuerte, me empujó fácilmente contra la pared. En ese momento pensé que me iba a estrangular hasta la muerte, pero solo bajó la cabeza y respiró silenciosamente en mi oído. —Si alguna vez descubro que hiciste algo absurdo sin mi permiso, te violaré. Recuerda, esos marineros a bordo están contratados por mí.

Pensé para mí mismo, por el amor de Dios, cuanto más lo pienso, más gracioso se vuelve.

Rhine es una persona con una boca jactanciosa, y con marineros a los que les gusta hacer bromas vulgares, ya me acostumbré después de estar mezclado dentro de esta comunidad camorrera durante varios meses. Entonces, ¿crees que todavía tendría miedo de esta broma ridícula?

Levanté un poco la cabeza para encontrar la punta de su nariz y oponerme a él con igual dureza. Abrí los labios y, con calma, chachareé una oración, —Una vez que me hayas violado, ¿se me permitirá estudiar al tritón? Si es así... adelante.

Obviamente quedó estupefacto, al parecer no esperaba que le devolviera un comentario tan absurdo. Su mano en mi espalda de repente aumentó en fuerza, se deslizó directamente por mi coxis y arrancó mi cinturón, como si estuviera enojado. Pensé que solo estaba bromeando, así que de manera perezosa fingí forcejeo un par de veces hasta que mi cadera chocó con su entrepierna.

Mi cuerpo se congeló en un instante.

El "juguete" erecto de Rhine debajo de su abdomen me estaba presionado con fuerza.

¡Maldita sea, mi compañero mentor es en verdad gay y se siente sexualmente atraído por mí, su alumno!

Recordando cómo había estado codo a codo con él durante varios meses, brinqué de la cama, me golpeé la cabeza contra la barandilla y me aparté rápidamente, levantando tres dedos con una cara cenicienta. —Oh, oh, oh, juro por Dios que no tocaré a ese tritón sin permiso.

Rhine apartó la mano y se incorporó lánguidamente sobre la cama. Levantó una de sus cejas y me contempló con sospecha, sus delgadas piernas entrecruzadas y sin siquiera molestarse en ocultar el bulto erecto en la entrepierna de sus vaqueros.

Rasqué mi mejilla levemente febril. Para aliviar la vergüenza, exprimí una broma a través de mis dientes apretados: —Ha creciendo bastante bien, más grande que el mío.

Rhine miró hacia abajo, la sombra de su flequillo asoló la esquina de su boca, transmitiendo secretamente el amago de un arco significativo. Un escalofriante entumecimiento que podía hacer que la sangre de uno se enfriara, se precipitó desde las plantas de mis pies. Resistí el impulso de abrir la puerta de una patada para escapar. De una manera pausada, lo observé levantarse lentamente de mi cama antes de al fin salir caminando.

Rhine probablemente pensó que su intimidación fue exitosa, por lo que no siguió acosándome. Pero desafortunadamente, soy un ateo que nunca se comprometió a ninguna religión, por lo que hacer esa promesa fue solo un gesto hipócrita.

Esa noche me quedé completamente despierto, esperando en silencio que todo el barco se acallara, incluso asegurándome de que los marineros que realizaban deberes nocturnos estuvieran dormidos, antes de agarrar una varilla fluorescente y un pequeño equipo útil: un pequeño sonar y una cámara Dv submarina. Me había comunicado exitosamente con muchas especies de organismos distintos utilizando estos, por lo que, por experiencias personales, estaba claro que eran herramientas auxiliares indispensables.

Pero, por supuesto, lo más importante seguían siendo los mismos comunicadores, utilizando experiencias biológicas para comunicarse.

2:11 de la mañana. El momento más soñoliento de la humanidad. Revisé el reloj electrónico en mi mano, y como un suricato escondiéndose en la oscuridad, evité con éxito el área visible de la cubierta observada. No perdí nada de tiempo e incluso me escabullí victoriosamente en la sentina del barco.

Cuando abrí la puerta al final de la sentina, una luz verde se mostró en la oscuridad y pronto apareció un tanque de agua cilíndrico y de cristal. Levanté la varilla fluorescente y busqué en un grupo de plantas acuáticas artificiales la forma borrosa y curva de una sombra delgada, descubriendo que el tritón estaba flotando tranquila y silenciosamente en lo alto del cilindro. A través del cabello flotante, pude ver su nítido rostro inclinado y delineado, al igual que un demonio silencioso en la noche tranquila, aterrizando para llevarse mi alma en cualquier momento.

Respiré profundamente tratando de calmar la creciente adrenalina que fluía dentro de mí, antes de subir la escalera de caracol posicionada alrededor del cilindro de cristal. Por desgracia, mi corazón aun así no podía detener sus salvajes latidos.