La onicomicosis es una enfermedad infecciosa de las uñas de manos o pies causada por tipos específicos de hongos. El hongo en realidad se esconde debajo de la uña y vive del tejido ungueal.
Se da más frecuentemente en pies y esto se debe a que estos son más propensos a entrar en contacto con hongos. Además, el hongo se desarrolla con facilidad en lugares oscuros y húmedos, como el interior de los zapatos.
La onicomicosis comienza en la superficie de las uñas y la piel, pero va penetrando cada vez más profundamente causando más y más daño a la uña y al tejido circundante de piel.
Si la infección se deja sin tratar, esta se continuará extendiendo a otras uñas, agravando el problema.
Básicamente, el hongo no se erradica solo con limpieza o higiene personal, debe ser tratado para desaparecerlo.
Al principio los síntomas sólo son a nivel estético (cambio de color, engrosamiento, callosidad entre la lámina y el lecho) afectando al paciente en sus actividades de índole social, pero si se deja evolucionar la enfermedad sin tomar medidas, se producirá una destrucción de la uña y dolor al calzarse.
En la visita al podólogo se puede valorar visualmente si existe una infección de la uña por hongos cuando lo observa directamente. Los datos de coloración, deformidad y fragilidad son bastante característicos y orientan hacia el diagnóstico de onicomicosis.