Nació en la ciudad de 9 de Julio, Pcia. de Buenos Aires el 3 de diciembre de 1920. Fue el hijo número veintidós de Giuseppe Pironio y Enrica Rosa Buttazzoni, emigrados a la Argentina ya como matrimonio desde la región de Friuli, Italia, en 1898. Eduardo, solía comentar que su vida era un milagro concedido a su madre por la Virgen de Luján, por quien él sentía una filial devoción.

Al crecer, la devoción en Jesús y María cimentadas en su familia y su parroquia se fue fortaleciendo. De esta manera, a sus 11 años el joven Eduardo Pironio tomó la decisión de ingresar al Seminario San José de La Plata

Culminado el tiempo de formación, fue ordenado presbítero el 5 de diciembre de 1943 en la Basílica de Nuestra Señora de Luján. Comenzó así su ministerio sacerdotal como profesor de Literatura, Latín, Filosofía y Teología sucesivamente en el Seminario Pío XII de Mercedes, donde acompañó la formación de futuros presbíteros durante 15 años.


“Te doy gracias, Padre, por el don de la vida. ¡Qué lindo es vivir! Tú nos hiciste, Señor, para la Vida. La amo, la ofrezco, la espero. Tu eres la Vida, como fuiste siempre mi Verdad y mi Camino”.
(Testamento espiritual)