Ayuda a aumentar la atención.
Fortalece el sistema inmunológico.
Reduce el impacto emocional del dolor.
Relaja.
Reduce en un 50% la posibilidad de sufrir un ataque cardíaco.
Aumenta el grosor del cerebro.
Retrasa el envejecimiento.
Aumenta tu autocontrol.
Mejora tu vida social. Reduce sensaciones como la soledad y la angustia.
Potencia la creatividad. La meditación genera claridad mental y emocional.
Reduce la ansiedad. Reduce el estrés.
Fortalece el sistema inmunológico. Se pueden aplicar en el estómago, para paliar los problemas digestivos, o en la frente, entre otros, para calmar los dolores de cabeza e insomnio
Elimina toxinas. Desintoxica el organismo y la piel empleando aceites esenciales. Además, durante el masaje se trabaja el sistema linfático, ayudando a acelerar su circulación.
Aumenta la flexibilidad. Los músculos se encontrarán mucho más relajados y revitalizados después de cada sesión. Además, también puede llegar a mejorar la movilidad de las articulaciones.
Dra. Riitta Hari, Universidad de Aalto (Finlandia).