Maldito Rodolfo Alonso

Como Rimbaud en Harrar

¿Sin que la poesía me abandone

también yo he frecuentado reyezuelos

en ácidas comunas suburbanas

por óbolos pequeños, subsistencias,

en los alrededores del poder?

¿Salvando las distancias, lenguaraz

de caciques menores, jefes siervos,

sustentando retoños vigorosos

con migajas de estruendo, alegorías,

para que la poesía me abandone?