Cada jugador empieza con cuatro cartas-personajes de la
baraja de cualidades. Se pone una carta-objetivo en juego. Cada carta-objetivo se consigue con un requisito (protagonismo, ingenio, prudencia o bondad) con una puntuación mínima o máxima. Cada jugador elegirá una de su mano (utilizad el dado para establecer el orden). Ganará el objetivo la carta con puntuación más alta/baja, dependiendo del objetivo que marque la carta. Es obligatorio intentar conquistar el objetivo. Las cartas jugadas se devuelven al montón y quien gana la mano guarda la del objetivo. Quien no tenga carta que pueda superar el requisito, juega la baza que quiera. Si nadie tiene carta con el requisito mínimo, se deja en la mesa y se saca otro y cada jugador se desprende de una carta y cogerá otra del montón. Ganará quien obtenga más puntos cuando se hayan jugado los 30 objetivos. Se puede consultar las cartas de índice de personajes.