varias provincias y ciudades del país, dice la consultora PwC, ofrecen políticas preferenciales e incentivos financieros generosos para las empresas emergentes en inteligencia artificial (IA). Por ejemplo, la ciudad de Shenyang ha establecido un fondo de inversión de 20.000 millones de yuanes, 23.400 millones de dólares de Hong Kong, centrado en el desarrollo de la robótica.
Estas políticas favorables son las que han inspirado innovaciones de las empresas en China en el campo de la IA. A multinacionales ya consolidadas como Baidu, Alibaba, Huawei, ZTE y Tencent, se han unido empresas emergentes como Megvii, iCarbonX, Mobvoi y SenseTime, y unicornios,startups con valoraciones de más de mil millones de dólares, como Didi, Chuxing y Xiaomi, que recientemente ha aterrizado en España para vender sus smartphone baratos, entre otros dispositivos.
Baidu, por ejemplo, ha desarrollado un sistema de traducción automática basado en redes neuronales que ha logrado una precisión de reconocimiento de voz superior a la de los humanos. También ha lanzado Apollo, una plataforma de código abierto para soluciones de conducción autónoma. Tencent, por su lado, ha creado su propio laboratorio de IA, que reúne a 50 científicos, investigadores y expertos de clase mundial para centrarse en "contenidos y juegos basados en la inteligencia artificial", señala PwC.
Didi Chuxing, también está trabajando en aprendizaje profundo, interacción hombre-máquina, visión artificial y tecnologías de conducción inteligente. Procesa más de 4.500 terabytes de datos, recibe más de 20 mil millones de solicitudes de ruta y maneja más de 20 millones de pedidos de media al día, según Goldman. Hikvision usa inteligencia artificial para productos de vigilancia, incluidas cámaras inteligentes. Mobvoi, por su parte, se centra en el habla y lenguaje natural, y SenseTime está enfocada en la visión por computadora y el aprendizaje profundo, y en abril consiguió 450 millones de dólares de financiación en una ronda con inversores, y en la actualidad los expertos la valoran en unos 4.500 millones de dólares, unos 37.000 millones de euros.