Reunidos en familia, rezando el Santo Rosario y meditando los Misterios gozosos, la Visitación de Nuestra Señora a Santa Isabel nos inspira a tender la mano como familia para ayudar a los demás cuando lo necesitan y a amar a los que no son amados.
Caminando alrededor de la casa con nuestra Madre Santísima meditando los Misterios Dolorosos, La Agonía de nuestro Señor; en nuestra vida de Familia, pasamos por dolores y sufrimientos, pero profetizar el nombre de nuestro Señor e invocar su santa presencia nos da alegría y consuelo. Que nuestra Familia se llene de su divina presencia.
Rezando juntos el Santo Rosario en familia, meditando sobre la presencia de nuestra Santísima Madre en las Bodas de Caná, Como familia, debemos invocar siempre la presencia de nuestra Santísima Madre en cada circunstancia de nuestra Familia ya sea en las penas y alegrías, Dolores y sufrimientos. Dejemos que nuestra Madre interceda por nuestra Familia.