A lo largo de este primer recorrido hemos intentado arriesgar una lectura del tiempo y del mundo que nos toca vivir. Hemos producido algunas definiciones, y nos hemos contactado con algunas sensaciones que despiertan las descripciones que logramos.
Hemos contemplado un mundo y un tiempo muy distinto a lo que imaginamos. Un momento histórico que nos inquieta y que según pudimos dialogar hace una semana atrás nos hace convivir con los siguientes interrogantes:
Todo esto nos inquieta, nos hace vivir incómodamente esta situación:
"Estamos incómodos. Quiero partir desde esa certeza difícilmente discutible. Hay una incomodidad física, palpable en el encierro, en la quietud obligada, en la falta de aire y sol, en la imposibilidad de caminar. Estamos incómodos también en la falta de certezas respecto a lo que está pasando, a cómo afrontarlo o a lo que puede suceder. Este sentirse fuera de sitio es producto de una interrupción y a la vez consecuencia de la necesidad de un hacer distinto. Estamos incómodos, y este es uno de los principios posibles del pensamiento y de la transformación de la vida. Después de todo, queremos hablar de mundos posibles o, mejor aún, esperamos con oídos atentos a esos mundos posibles que ya están hablando por sí mismos. Por eso es fundamental que no nos apuremos a salir de la incomodidad en la que estamos. No nos adaptemos rápida y eficazmente a las nuevas condiciones imperantes como si no hubiera pasado nada. Porque esa es la regla que tienen siempre aquellos que se adaptan: hacer como si nada pasara en la vida. Con o sin pandemia. Con o sin cuarentena". Singer Diego, Pandemia y mundos posibles.
La incomodidad de este tiempo nos lleva a dirigir nuestro sentido hacia nuevos mundos posibles. Este tiempo humano, para la fe cristiana ha estado acompañado por un tiempo de Dios, un tiempo Santo, propio de la Cuaresma y la Pascua. Por eso, puede resultarnos valioso recuperar algunas percepciones y certezas que provienen de la voz del Papa Francisco. Te propongo leer estas 3 homilías, que fueron surgiendo con motivo de este tiempo litúrgico. En ellas vamos a intentar descubrir el tiempo y el mundo que allí surgen de estas reflexiones hechas a la luz de los Evangelios.