Ingredientes
Un cordero
Un vaso de agua
Ajos
Un vaso de vino blanco
Sal
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Podemos hacerlo de muchas formas, pero nosotros os proponemos dos muy parecidas. En primer lugar, con los ingredientes indicados. ponemos el horno (las dos partes) lo más fuerte posible mientras se prepara la fuente con el cordero, salándolo por las dos partes. Pasamos un ajo por las dos partes y ponemos en la fuente un poco de agua y muchos ajos (unos pelados y otros no).
Cuando se meta el cordero en el horno, se bajará a 180º la temperatura. Después de una hora u hora y cuarto, se da la vuelta al cordero. En total, debe estar unas dos horas aproximadamente.
Si se queda sin agua, echar un poco más. Y cuando quede un cuarto de hora aproximadamente, se echa el vaso de vino blanco.
¡Listo para comer!
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La otra forma de hacerlo, es prácticamente igual pero cambiando básicamente el vino blanco por 200 ml de agua y 20 ml de vinagre. El resto, más o menos igual...
Ingredientes
Una paletilla de cordero
200 ml de agua
20 ml de vinagre
Ajos
Manteca de cerdo
Hierbas al gusto (romero, tomillo...)
Sal
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Precalentamos el horno a 210º y mientras vamos preparando el cordero: lo untamos con manteca de cerdo para que quede doradito en el horno. Frotamos el cordero con los ajos y dejamos varios en la fuente. A continuación, lo aderezamos con una mezcla de hierbas que nos guste, por ejemplo, tomillo y romero. Sazonamos y cuando el horno haya alcanzado la temperatura indicada, lo ponemos en una fuente un poco engrasada y rociamos con la mezcla de agua y vinagre. Horneamos durante 15 o 20 minutos, dándole la vuelta de un par de veces.
Pasado ese tiempo, bajamos la temperatura a 160º y lo dejamos durante 90 minutos aproximadamente, dandole la vuelta de vez en cuando. Si vemos que se ha consumido todo la salsa, podemos añadir un poco más de agua. Al finalizar la hora y media, apagamos el horno y dejamos reposar el cordero un rato, 10 o 15 minutos, antes de empezar a comerlo, tapado para que se termine de cocinar en su interior.
Para acompañarlo, unas patatas a lo pobre van fenomenal.