En esta página me centro en las pruebas para evaluar la precisión y la fluidez lectora. No he incluido pruebas que evalúen los predictores del aprendizaje de la lectura ni tampoco pruebas de comprensión lectora, aunque varias de las que aparecen a continuación evalúan este aspecto. Se puede encontrar una recopilación bastante extensa de pruebas de comprensión lectora en Tests estandarizados de comprensión lectora.
Test chileno para la evaluación de la competencia lectora inicial. Evalúa a alumnado de 2.º curso de Educación Infantil a 2.º curso de Educación Primaria. Entre las pruebas que incluye hay una de lectura de palabras y otra de velocidad y eficacia lectora.
Es una batería con seis niveles (Infantil, E1, E2, E3, M y S) destinados a diferentes edades y con pruebas distintas. Ofrece una puntuación general de cociente intelectual y puntuaciones desglosadas en distintas áreas y para cada una de las subpruebas. En relación con la lectura, contiene una prueba de Memoria visual ortográfica, en la que se debe señalar, en grupos de tres palabras, cuál es la que está mal escrita.
Evalúa la lectura con una tarea de lectura de cuatro listas: palabras frecuentes, palabras infrecuentes, pseudopalabras y palabras homófonas. Estandarizada en Colombia y México.
Es una batería de aprendizajes con versiones desde el último curso de Educación Infantil hasta 4º de ESO.
Incluye pruebas de reconocimiento de las vocales, precisión en la lectura de palabras, frases y textos o velocidad lectora.
Evalúa la lectura, entre 3º de Educación Primaria y 1º de ESO con pruebas de lectura de palabras, pseudopalabras y pseudohomófonos, decisión léxica visual, asociación de palabras con su definición y lectura de texto.
Evalúa la lectura, entre 3º de Educación Primaria y 1º de ESO con pruebas de lectura de palabras, pseudopalabras y pseudohomófonos, fluidez lectora de textos y decisión léxica.
Se trata de una batería para alumnado de 3º a 6º de primaria, con bastantes pruebas de lectura, comprensión y otros procesos relacionados. Para estimar el nivel de descodificación pueden ser interesantes las pruebas de deletreo, lectura de palabras y pseudopalabras, decisión léxica, interpretación de homófonos, asociación palabra dibujo.
Cuestionario realizado por Ceferino Artiles y Juan E. Jiménez y publicado en Guía para la detección temprana de discapacidades, trastornos, dificultades de aprendizaje y altas capacidades intelectuales. El cuestionario de lectura se encuentra en la página 28. No contiene baremos o referencias para la interpretación de los resultados.
Adaptación al español del Hong-Kong specific learning difficulties behavior checklist, realizada por Ceferino Artiles y Juan E. Jiménez y publicada en Guía para la detección temprana de discapacidades, trastornos, dificultades de aprendizaje y altas capacidades intelectuales. Se presentan tres formas del cuestionario:
Forma A, para alumnado que inicia el tercer curso de Educación Infantil (pp. 12-15).
Forma B, para el alumnado que inicia el primer curso de Educación Primaria (pp. 16-20).
Forma C, para el alumnado que inicia el segundo curso de Educación Primaria (pp. 21-26).
No contiene baremos o referencias para interpretar la puntuación obtenida. Una nota en el documento advierte de que está prohibida su reproducción.
No dispongo de información sobre esta prueba.
Prueba para la detección del riesgo de dificultades de aprendizaje de la lectura y la escritura, de aplicación en tercer curso de Educación Infantil y 1º y 2º de Educación Primaria. Incluye escalas de lectura, escritura, velocidad de denominación, habilidades fonológicas y habilidades verbales (comprensión oral).
La prueba no incluye baremos, por lo que las puntuaciones se tienen que realizar por corrección a través de internet.
Adaptación al español de una prueba de Fawcet y Nicolson con 12 subpruebas, entre ellas, una de lectura de palabras y otra de lectura sin sentido. Su puntuación principal es un índice de riesgo de dislexia. También ofrece percentiles para cada una de las pruebas.
Parece estar descatalogado actualmente.
Prueba online ofrecida por Change Dyslexia. Requiere un registro previo.
Aunque el nombre indica que es una prueba de comprensión, incluye una medida de precisión en la lectura de palabras y pseudopalabras y dos medidas de velocidad (palabras y pseudopalabras y texto).
Está dividido en tres niveles (ECLE 1, 2 y 3) que abarcan desde 2º curso de primaria hasta 4º curso de ESO.
Cuestionario con 37 ítems. A diferencia de otras herramientas de este tipo, propone un punto de corte a partir del que habría riesgo de dislexia. No obstante, este es general y no considera la edad del alumnado.
Incluye pruebas de exactitud lectora (lectura de letras, sílabas y palabras), velocidad lectora y asociación entre palabra e imagen. Solo existe este nivel 1. Fuera de catálogo en la editorial TEA.
Conjunto de pruebas para el primer trimestre del último curso de Educación Infantil y el comienzo de los cursos 1º y 2º de Educación Primaria. En infantil se utilizan pruebas de:
Nombre de letras.
Sonido de las letras.
Aislar el primer fonema.
Identificar el fonema diferente.
Comprensión oral.
En primaria, a las anteriores se les añaden:
Lectura de palabras.
Lectura de pseudopalabras.
Lectura de un texto.
Comprensión lectora.
Dictado.
Los materiales y baremos se pueden encontrar en el documento Normativización de instrumentos para la detección e identificación de las necesidades educativas del alumnado con trastornos por déficit de atención con o sin hiperactividad (TDAH) o alumnado con dificultades específicas de aprendizaje (DEA) (pp. 45-70).
Esta prueba fue adaptada para Honduras y Nicaragua.
Consta de 20 ítems. Se ha evaluado su validez de contenido.
Consta de 20 ítems organizados en cuatro áreas: lenguaje oral, aprendizajes instrumentales, desarrollo grafomotor y capacidades cognitivas. Utiliza un formato tipo Likert de cuatro opciones y ha demostrado buena validez y fiabilidad. No incluye puntos de corte.
Se trata de una prueba de origen alemán adaptada en Chile y Uruguay, con tareas de reconocimiento de palabras, comprensión de oraciones y comprensión de textos.
Esta prueba tiene también el nombre de TALE-2000. Trabajaron en ella los autores del test TALE, pero, más que una actualización, se construyó un test diferente. Evalúa la precisión lectora con pruebas de lectura de sílabas, palabras y pseudopalabras, y la fluidez con pruebas de lectura de frases y textos. Solo existe baremo para la prueba de comprensión lectora.
Existe una adaptación peruana para el 2º curso de Educación Primaria (enlace).
Se trata de una escala baremada en Colombia y México, que evalúa distintos aspectos del desarrollo. Cuenta con una parte de lectura en la que se valora la precisión mediante pruebas de sílabas, palabras, pseudopalabras y oraciones, la comprensión y la velocidad de lectura en voz alta y de lectura silenciosa. También evalúa la conciencia fonológica.
Existen dos ediciones de estas pruebas, aunque ambas se basan en el mismo estudio de baremacion.
Adaptación chilena de las escalas diagnósticas de lectura de George Spache. Ofrecen referencias sobre la velocidad lectora y la cantidad de errores de lectura. No he visto una valoración de su validez y fiabilidad.
Batería de evaluación de la lectura que incluye pruebas de asociación de palabra con dibujo, reconocimiento de palabras bien escritas señalar pares que se lean igual o asociación de palabra escrita con palabra oral.
Pruebas para 2º y 6º curso de Educación Primaria, elaboradas por la Consejería de Educación de Andalucía para la evaluación de su alumnado. Permiten medir la precisión, la interpretación de los signos de puntuación y la velocidad de la lectura. Ofrecen como referencia la media y la desviación típica de cada medida para cada curso y un baremo de velocidad lectora.
Prueba para 4º curso de ESO, elaborada por la Consejería de Educación de Andalucía para la evaluación de su alumnado. Permite medir la precisión, la interpretación de los signos de puntuación y la velocidad de la lectura. Ofrece como referencia la media y la desviación típica de cada medida, y un baremo para la velocidad lectora.
Adaptación al español de las pruebas DIBELS, de la universidad de Oregón. Evalúa las habilidades de fluidez en nombrar las letras (FNL), fluidez en la segmentación de fonemas (FSF), fluidez en la lectura de palabras sin sentido (FPS) y fluidez en la lectura oral (FLO), desde el tercer curso de Educación Infantil hasta el tercer curso de Educación Primaria. También contiene una pruebas de fluidez del relato oral y fluidez en el uso de palabras.
Es posible acceder, para uso privado, a todos los materiales de IDEL en la web de DIBELS. Esto incluye manuales, materiales para el alumnado, cuadernillos de anotación y referencias para interpretar los resultados.
Pruebas de detección y seguimiento para utilizar en un modelo de respuesta a la intervención. Forman parte del libro coordinado por Juan E. Jiménez: Modelo de respuesta a la intervención. Un enfoque preventivo para el abordaje de las dificultades de aprendizaje. Se utilizan entre 3.º de Educación Infantil y 2.º de Educación Primaria
Kit con material de evaluación e intervención creado en Argentina. Evalúa la fluidez en la lectura de palabras, pseudopalabras y textos.
Incluye pruebas de lectura de palabras, lectura de pseudopalabras, prosodia, segmentación fonémica y lectura de letras. Se utiliza entre 1.º y 4.º curso de Educación Primaria.
Tiene baremos realizados en España y en Argentina.
Prueba rápida de lectura basada en la decisión léxica (identificar qué palabras de las que se presentan no son reales), de modo que se puede aplicar colectivamente. Con referencias para su uso entre 1.º y 4.º curso de Educación Primaria.
Se puede encontrar la forma A de la prueba, su estudio psicométrico y una tabla de percentiles en Propiedades psicométricas de una prueba de lectura de palabras (LEO-1-min).
Juegos informáticos para detectar el riesgo lector en Educación Infantil. Se trata de una herramienta desarrollada en Uruguay. Incluye una prueba de reconocimiento de palabras.
DAT 5 es una batería para educación secundaria que consta de distintas pruebas, entre ellas una de reconocimiento de errores ortográficos. Los distintos ítems presentan cuatro palabras, entre las que hay que elegir la que se ha escrito de forma incorrecta.
Evalúa la lectura al final de la Educación Infantil con pruebas de lectura de sílabas y lectura de palabras. También incluye para la Educación Primaria, pruebas de lectura comprensiva de oraciones y textos.
Batería de pruebas de evaluación analítica de la lengua escrita. Para la evaluación de la lectura ofrecen una prueba de detección de la "estrategia de palabras clave" (estrategia que consiste en tratar de comprender lo que se lee centrándose en algunas palabras, generalmente más largas, en las que se espera encontrar mayor contenido) que se utiliza entre 1º de primaria y 4º de ESO. También se encuentra la prueba PIPE, de identificación de palabras escritas, que se emplea entre 3º de infantil y 2º de primaria y que tiene tres versiones (mayúsculas, letras de imprenta, letra ligada).
Los baremos solo ofrecen las puntuaciones medias.
Prueba destinada a los tres primeros cursos de Educación Primaria. Evalúa la precisión en la lectura de una lista de 100 palabras. Forma parte del libro Retraso en lectura: evaluación y tratamiento educativo de Maldonado, Soto y Sebastián (1992).
Es una batería para la detección de dificultades lectoras y matemáticas. Cuenta con una versión en catalán. La prueba de lectura se aplica en tres minutos y consiste en completar oraciones eligiendo una opción entre cinco alternativas.
Se trata de varios cuestionarios. Los originales están en catalán. Aquí podemos encontrar la traducción al español de PRODISCAT, una colección de seis cuestionarios para constatar indicadores de riesgo de dislexia entre el final de la Educación Infantil y el Bachillerato. Estos cuestionarios no ofrecen un baremo o punto de corte, pero sí que señalan algunos ítems clave en los que se indica que sí se observan sería necesaria una intervención.
Aquí se puede acceder a la traducción al españlo de PRODISCAT pediátrico, que consta de seis cuestionarios (para 4, 5, 6, 7, 8-9 y 10-11 años). El cuestionario pediátrico indica que se debería consultar con un especialista a partir de cuatro ítems afirmativos. Se han publicado datos sobre su poder predictivo.
Conjunto de cuestionarios dirigidos a distintos niveles:
No se acompañan por baremos o referencias.
Seguramente es el test más utilizado en España para la evaluación de la lectura. Incluye tareas de reconocimiento de letras, igual-diferente, lectura de palabras, pseudopalabras e interpretación de signos de puntuación. En todas ellas se consideran la precisión, la velocidad y su combinación.
Tiene también otras pruebas de comprensión (estructuras sintácticas, oraciones, textos escritos y oral).
A pesar de que se ha publicado una nueva edición de este test (PROLEC-SE-R, que se comenta a continuación), el PROLEC-SE sigue teniendo interés por dos motivos: el primero es que ofrece referencias para los cursos 5º y 6º de primaria, que no están incluidos en la nueva edición y para los que los materiales del PROLEC-R pueden resultar fáciles. El segundo es que se tiene acceso directo al baremo, algo que no sucede en la versión revisada que se corrige a través de una aplicación informática.
El PROLEC-SE cuenta con una prueba de lectura de palabras y otra de lectura de pseudopalabras en las que se considerán la precisión y la velocidad. También incluye una valoración de velocidad lectora, además de otras escalas para la evaluación de la comprensión.
Batería de evaluación de la lectura para Educación Secundaria Obligatoria y Bachillerato. Entre sus escalas están la de selección léxica, categorización semántica, lectura de palabras y lectura de pseudopalabras, que se combinan para proporcionar un índice léxico. También puede resultar de interés la prueba de signos de puntuación. El resto de las escalas están orientadas a la evaluación de la comprensión.
Parte de las pruebas se puede emplear de forma colectiva para detección de problemas.
Escrutinio de predictores de lectura. Este test, estandarizado en México, está formado por seis tareas. Tres de ellas se pueden considerar de procesamiento de pseudopalabras o de lectura: "pareamiento de seudopalabras", "pareamiento de no palabras" y e "identificación de la palabra con ortografía correcta". Las otras son de vocabulario y habilidades fonológicas.
Incluye dos baterías, una para la detección de la dislexia entre los 4 y los 6 años y otra para el diagnóstico de la dislexia a partir de los 7 años de edad. La batería de detección temprana incluye pruebas de conciencia fonológica, memoria fonológica y denominación rápida (no de lectura o escritura). La batería diagnóstica completa las áreas anteriores con pruebas de lectura y dictado de palabras y pseudopalabras.
Colección de pruebas de fluidez lectora elaboradas y baremadas en Chile.
Colección de pruebas elaboradas por Rafael Bisquerra para su uso desde el primer curso de Educación Primaria hasta adultos. Ofrecen una referencia de velocidad en lectura silenciosa. Están publicadas en el libro Eficiencia lectora. La medición para su desarrollo.
Pruebas de María Victora de la Cruz, actualmente descatalogadas. Desconozco su contenido concreto.
Prueba de 1977, para su aplicación a alumnado chileno de 2º curso de primaria. La valoración se hace a partir de una puntuación general que combina el resultado en pruebas de lectura y escritura, sin que esas habilidades se traten por separado.
Conocidas también como pruebas de Canals (Ramón Canals es el autor principal). Parecen estar descatalogadas. Valoran la velocidad lectora.
Este test data de 1972 y ha tenido numerosas reimpresiones. Valora la lectura con pruebas de lectura de letras, lectura de sílabas, lectura de palabras y lectura de textos, considerando tanto la precisión como la velocidad.
No tiene un baremo, sino que sitúa al alumno en un nivel, correspondiente a 1º, 2º, 3º o 4º curso de EGB (Educación Primaria, en la actualidad). No obstante, sí que ofrece las medias y desviaciones típicas de los resultados.
Prueba desarrollada por Marín y Carrillo (1999). Como su nombre indica, se puede aplicar de forma colectiva. Los alumnos tienen que completar en cinco minutos el máximo número posible de oraciones a las que les falta una palabra, eligiendo la correcta de entre cuatro alternativas.
Cuadernillo (material para los alumnos).
Puntos de corte para la detección de la dislexia (2º, 4º y 6º de primaria).
Prueba de Mabel Condemarín y Maryls Bloomquist. Circula un documento de Condemarín con las instrucciones de la prueba, la hoja de respuestas y los baremos. Cuenta con tareas de lectura de letras, sílabas, pseudopalabras y palabras.
Por lo que he podido ver, la estandarización del test se hizo en Chile en 1974.
TEDE - Instrucciones, hoja de respuestas y baremos y estímulos.
Prueba elaborada por Jesús Pérez González (1980). Se baremó con una muestra de alumnos de 1º de EGB (Educación Primaria) de Las Palmas. No se ofrece información sobre el tamaño de la muetra, la fiabilidad o la validez de la prueba. Evalúa precisión y velocidad lectora, además de la comprensión. La velocidad lectora que se ofrece como referencia es baja, algo que ya comenta el autor en la introducción a la prueba.
Existen distintas versiones de las escalas de Woodcok. Algunas están adaptadas al español, aunque son poco utilizadas, al menos en España. En Perú, Violeta Tapia realizó una estandarización de la Batería Woodcock de proficiencia en el idioma, que cuenta con una escala de lectura formada por una prueba de identificación de letras y palabras, una prueba de análisis de palabras (lectura de pseudopalabras) y otra de comprensión de textos.
La versión más reciente es la Batería III de Woodcock-Muñoz, baremada con hispanohablantes de Estados Unidos y otros países iberoamericanos entre los que España está mínimamente representada. Tiene pruebas de identificación de letras y palabras y fluidez en la lectura.
Descripción de la Batería III.
La Woodcock-Muñoz Language Survey III tiene dos formas en inglés y una en español. Cuenta con una escala de lectura. Desconozco si es distinta de la que se emplea en la Batería III.
Se trata de un test breve, de no más de 10 minutos de duración, con seis pruebas de:
Discriminación de fonemas.
Segmentación de sílabas.
Identificación de un fonema.
Repetición de pseudopalabras.
Repetición de dígitos.
Fluidez verbal.
Se utiliza a los 4 años y se diseñó para la identificación de dificultades de aprendizaje en las consultas de pediatría. En un estudio de seguimiento, ha mostrado tener una correlación de 0,25 con la eficiencia en la lectura de palabras y pseudopalabras a los 7 años. Cuatro de los 8 niños participantes detectados con riesgo de dificultades de aprendizaje a los 4 años tenían problemas serios en la lectura a los 7 años.