El teléfono móvil puede ser una herramienta potente en el ámbito educativo si se usa debidamente para tal fin. Actualmente, los teléfonos cuentan con tecnología que puede ser útil como recurso didáctico.
Por ejemplo, puede utilizarse para medir la iluminancia de un foco de luz, el campo magnético al que se encuentra sometido el dispositivo, generar tonos de diferentes frecuencias, o incluso la intensidad de un aplauso.
En esta sesión, vamos a hacer una aplicación llamada Phyphox.
Esta app nos da la oportunidad de utilizar los diversos sensores con los que puede contar nuestro teléfono para la medida de una gran variedad de magnitudes físicas.
También muestra gráficas y permite guardar las medidas y exportar los datos para su posterior tratamiento y análisis.
La imagen que se muestra corresponde la sesión que se dedicó a aprender a utilizar esta aplicación, en la cual utilizamos varios de sus modos de funcionamiento, por ejemplo, medir la velocidad a la que asciende o desciende un ascensor, o la frecuencia de una interferencia producida por dos tonos a diferentes frecuencias.
Esta gráfica ha sido exportada de phyphox. Los datos corresponden a una caída libre, para la cual metemos el teléfono en una bolsa atada con una cuerda a la mano de la persona que va a medir (para evitar el impacto contra el suelo) y se deja caer unos dos metros. La gráfica corresponde a la aceleración que experimenta el dispositivo en caída libre en el eje vertical, sin tener en cuenta la aceleración de la gravedad en el fondo de la gráfica.