Septiembre Diciembre 2021 VOL. 4 N-3

BOLETÍN PIT

"TUTORÍAS"

La calidad de las instituciones educativas es y ha sido una preocupación surgida de la expansión de los servicios educativos, de tal forma que día a día, buscan la calidad a través de diversos organismos y estudios respecto a su quehacer educativo con la finalidad de llegar a la excelencia educativa.

En México, la masificación de la educación superior no corrió a la par de los cambios y las transformaciones para mejorar su calidad. Actualmente las IES se están transformando con el fin de elevar la calidad de sus servicios, mediante la búsqueda de la eficiencia de los procesos, la eficacia e impacto de los resultados y la congruencia de estos con las demandas sociales y económicas del país (ANUIES, 1984).

La Coordinación Nacional para la Planeación de la Educación Superior (CONPES), recomendó en 1990 que las IES presentaran acciones para el “mejoramiento de la calidad del tercer nivel en torno a diez líneas prioritarias: Actualización curricular; formación de académicos e investigadores; revisión y readecuación de la oferta educativa; definición de una identidad institucional en materia de investigación y posgrado; actualización de la infraestructura de apoyo académico; reordenación administrativa y normativa; sistema institucional de información; diversificación de las fuentes de financiamiento; e impulso a la participación de los sectores social y productivos en la tarea de educación superior”. Pablo Latapí hace referencia a la calidad, la cual se logra "cuando lo que se hace se hace bien; en el caso del conocimiento, que es el objeto de la educación superior, la calidad se logrará cuando éste se transmita, se asimile y se produzca de la mejor manera posible"; su propuesta es una aproximación a la definición de calidad que propone Gago (1987:XI): "el beneficio máximo posible en el aprovechamiento del conocimiento".

En este marco de referencia, los estudios que se impartan en la Universidad deberán ser de la más alta calidad académica a que sea posible aspirar, de acuerdo con las circunstancias. Para ello, y como punto de partida, deberá garantizarse un mínimo de normatividad en la aplicación de las funciones de docencia, investigación y difusión, consistente en la existencia y cumplimiento de planes y programas de estudio, así como de las normas relativas a la asistencia laboral y el cumplimiento de responsabilidades por parte de profesores y alumnos. La institución no deberá considerarse satisfecha con lo anterior, sino que la calidad deberá entenderse como una noción compleja, que incluye las dimensiones de relevancia de los contenidos de planes y programas en relación con las necesidades del entorno social; eficacia interna, en el sentido de cumplimiento de los objetivos propuestos en los programas de trabajo, y externa, en el sentido de satisfacción de las necesidades a las que pretenden dar respuesta esos programas; eficiencia, en el sentido de aprovechamiento óptimo de los recursos; y equidad, en el sentido de apoyo diferenciado a los alumnos, en la medida en que lo requieran, para que todos alcancen en un grado suficiente los objetivos de los programas.

Convocatoria 9no. Encuentro Regional de Tutorías.