Construcción de un termómetro

En una botella con tapón que se pueda perforar, pon agua u otro líquido coloreado. A través del tapón introduce en la botella una pajita con la longitud suficiente para llegar hasta el líquido y sobresalir (cuanto más larga sea más temperaturas podrás medir con tu termómetro).

Sella lo mejor posible el tapón y la zona perforada para impedir la entrada y salida de aire. (También conviene que tapones la parte superior de la pajita para evitar que pueda entrar aire cuando no lo estás usando).

Ya puedes empezar a usar tu termómetro, para ello sitúalo en algún sitio que esté a distinta temperatura que el lugar donde lo has construido y observa lo que ocurre.