José Joaquín López Montenegro
Por José Ramón Francia Silva
Aunque como vemos en el apartado de heráldica, de esta web, su familia va existía hacía siglos en Villoslada dedicándose a la trashumancia, José Joaquín nació en esta villa en 1720 (bautizado el 4 de Marzo) y murió en 1792.
Los comienzos de José-Joaquín estuvieron relacionados con una buena preparación académica y militar, o por lo menos esas eran las intenciones de su padre, sin embargo al morir cuando tenía 15 años (1735), fue lo que posiblemente hizo cambiar el rumbo de su vida.
Se había formado en el Real Seminario de Nobles de Madrid, que había mandado construir Felipe V (1683-1746) para educar a los jóvenes nobles, con una formación integral, no solo académica y bajo el amparo de los jesuitas. Las rentas del tabaco, en 1725 le servían de sustento a la institución. Había alcanzado la dignidad de Caballero de Banda Roja (fue fundada en Burgos por Alfonso XI en 1332, abolida por los Reyes Católicos y restaurada por Felipe V; duró hasta 1836).
Real Seminario de Nobles de Madrid. Fundado por FelieV en 1725.
Cuartel bajo la invasión de Napoleón, después Hospital y posteriormente derruido y con nuevas edificaciones militares.
Era Paje del Gran Maestre de Malta (la condición de Paje había nacido en Malta a principios del siglo XVII y donde se quería imitar a las Cortes Reales europeas). Los jóvenes eran cuidadosamente seleccionados entre los nobles de las familias católicas de Europa. Su objetivo era prepararse para hacer las pruebas de la Orden de San Juan de Jerusalén (Orden de Malta). Nació esta orden en el siglo XI en Jerusalén, era cristiana y desarrolló actividades militares contra los árabes principalmente, pero también contra los turcos; mantenían una gran fuerza naval en el mediterráneo y los caballeros estaban obligados a estar en Malta durante un lustro.
Caballero de la Orden de Malta (Orden de San Juan de Jerusalén) (Fot. arquehistoria.com)
La intención de su padre Juan José era que fuera Caballero de esta Orden de Malta y que sirviera al Rey en esta Isla que era gobernada por la Orden. Y llegó a ser Capitán de Infantería de los Reales Ejércitos de su Majestad (Archivo H. Provincial de la Rioja, legajo 7118).
No se sabe la realidad del por qué de la vuelta de José Joaquín, pero a partir de 1738 se encargó de la administración de la ganadería trashumante.
Se casó en 1742 con una prima Andrea Izquierdo Maturana, cuyo padre era de Villoslada, pero Teniente de Gobernador en Treviño, donde se casó José-Joaquín, aunque posteriormente quiso recibir la bendición nupcial de la Virgen de Lomos de Orios en su Ermita.
Posteriormente D. José Joaquín desempeñaría el cargo de Teniente de Gobernador y justicia Ordinaria en Villoslada. Durante los años entre 1738 y 1752 aumentó la cabaña familiar de su madre, Josefa Fernández de Velasco en más de 3000 cabezas de ganado, pasando a tener 10.876 (Un ganadero camerano en la Extremadura del siglo XVIII: D. José Joaquín López Montenegro y Fernández de Velasco, Mateos Iñiguez, Ramón. Rev. De Est. Extremeños, 1999. nº 2).
En el año 1765, año en que se realizó el reparto familiar él tenía más de 13.000.
(Fot. Mateos Iñiguez, Ramón. Revista E. Extremeños. 1999, nº II)
No obstante la mayor apuesta fue la compra de la cabaña al Duque de Medinaceli y el consiguiente alquiler de las dehesas en el Estado de Feria. El historiador Manuel Sánchez Gómez-Coronado es el que mejor ha estudiado los movimientos y arriendos relacionados con la cabaña de D. José Joaquín.
El Duque de Medinaceli necesitaba saldar deudas y vendió a Manuel Lumbreras su cabaña merina (1768), pero esta venta estaba ligada también al arriendo de las dehesas. Pero para Coronado Manuel Lumbreras parece que fue agente de D. José Joaquín, ya que el aprovechamiento lo llevó a cabo la cabaña de José Joaquín, por lo que el ganado merino parece que pasó a él. El dinero de las fincas arrendadas era de 55.875 reales, según Coronado (El Ducado de Feria al final del Antiguo Régimen, UNED, 1993, 247).
En los años posteriores siguió arrendando dehesas, pero no sin problemas, aunque su hermano Pedro-Pablo que estaba en la Corte Madrileña favoreció el auge de su cabaña, también un tío suyo hermano de su madre, Archivero del Honrado Concejo de la Mesta, Francisco Fernández de Velasco había ayudado a su familia.
Una de las dehesas que más problemas le dio fue la de El Bravero, en Valencia de Mombuey, por las fricciones con los vecinos por los derechos sobre las hierbas y bellotas. Por ello se vió obligado a alejarse hacia Cáceres y comprar dehesas propias.
Posteriormente a 1775 cada vez arrendaría al Duque en plazos más amplios, ya que le interesaba estabilidad y precios más justos y razonables, además de que se ahorraba gastos, por ello lo hacía en plazos de 3, 4 ó más años. Parece que una de las mejores épocas para la explotación trashumante fueron los años entre 1763 y 1785. En 1792 moriría D. José Joaquín.
Arrendamiento de pastos en Dehesas (Fot. Mateos Íñiguez, Ramón)
Su viuda e hijo Santiago principalmente aprovecharon la oportunidad (1793) de la venta a subasta del Señorío de Castellanos, del Conde de la Puebla de Valverde, en la parte Sur de Cáceres, sin duda asesorados por D. José Joaquín que ya la conocía. Después de varias subastas y rebajada la compraron a favor de su mujer D. Andrea y sus hijos Pedro-Pablo, Manuel Mª y Santiago. En la Escritura aparece “la dehesa, su castillo, jurisdicción, pastos, tierras, montes, aguas y demás regalías y privilegios anexos a ello” (pág 453 Coronado).
Los hijos de D. José Joaquín acabaron asentándose en Extremadura. No vivieron mucho, el que más vivió hasta 1823, Manuel Mª.
Al parecer la cabaña entre 1780 y 1800 disminuyó poco (de 15000 a 14000 cabezas, que pudieron ser 20.000 en algunos momentos), lo que si que sucedió es que hubo problemas con las lanas debido a los conflictos con Francia e Inglaterra, naufragios..
Según Mateos Íñiguez con los datos de 1780, D. José Joaquín era uno de los 20 ganaderos más importantes de la Corte. Los recursos los había utilizado en aumentar la cabaña y en la compra de la Dehesa de los Castellanos. Según este mismo autor compró en Villoslada entre 1783 y 1792 13 heredades por 6.412 reales y 800 cabezas de ganado, en 1791 por 61.600 reales.
Parece ser que las finanzas de D. José Joaquín fueron relevantes dada la producción de lana de su cabaña y por el trato con los banqueros españoles y extranjeros en los negocios. Tenía relaciones con las casas de comercio Romero de Thejada Sobrino e hijos de Madrid, con las Casas de Comercio D. Nicolás Mudy y Midy Hnos, en Rouen (Francia) y otras casas de Londres y Bristol.