Ternero, de 22 días, con signos no progresivos desde el nacimiento, siendo el único caso en la explotación, no habiendo antecedentes de traumatismo.
Observar que el estado mental es normal y que no existe parálisis (mueve las extremidades cuando está en decúbito).
Anatomía patológica: meningoencefalitis no purulenta de posible origen vírico que afecta a tronco encefálico, bulbo raquídeo y médula cervical.
Mastín, de 8 meses, con signos progresivos desde hace 2 meses, sin antecedentes de traumatismo.
No se observan signos radiológicos.