El Raspberry Pi es un ordenador de bajo coste del tamaño de una tarjeta de crédito, que se puede conectar a una televisión y a un teclado para realizar muchas de las tareas que habitualmente se llevan a cabo con un PC o un ordenador portátil.
Ha sido diseñado por un grupo de profesores de la Universidad de Cambridge con el objetivo de animar a niños y jóvenes a aprender Informática con un precio que permita a todo tipo de usuarios acceder a un equipo.
Se trata simplemente de una placa a la que hay que conectar los periféricos necesarios, instalar un Sistema Operativo y poner en funcionamiento, de forma que son los usuarios los que controlan y administran todos los dispositivos hasta que este funciona.
La comercialización, que se lleva a cabo desde 2012, se realiza a través de la Fundación Raspberry, que es una asociación caritativa regulada por la Comisión de Caridad de Inglaterra y Gales. Durante los seis primeros meses vendieron 500.000 unidades. Hay dos tipos de dispositivo y su precio oficial es de 25€ el tipo A y 35€ el tipo B.
Google, a través de su obra social, Google Giving, decidió donar a Raspberry fondos necesarios para repartir 15.000 equipos Raspberry Pi Model B en colegios de Reino Unido, donde se está implantando su uso masivo en educación.