La Edad Media, que se extiende aproximadamente desde el siglo V hasta finales del siglo XV, se divide comúnmente en tres periodos: Alta Edad Media, Baja Edad Media y finales de la Edad Media. Este período fue testigo de importantes transformaciones en Europa, tanto sociales como políticas, económicas y culturales.

La Edad Media fue un tiempo de transformación en Europa. Aunque a menudo se la considera una época oscura en comparación con la Antigüedad y la Modernidad, en realidad fue un período de importantes desarrollos en la religión, la cultura, la política y la economía que sentaron las bases para el mundo moderno.

Edad Moderna, que abarca aproximadamente desde finales del siglo XV hasta finales del siglo XVIII, es un período de grandes transformaciones en Europa y el mundo. Se caracteriza por cambios significativos en lo político, social, económico y cultural, marcando la transición hacia la contemporaneidad

La Edad Moderna fue un período crucial en la historia que vio el surgimiento de nuevas ideas y estructuras sociales, políticas y económicas. La interacción entre diferentes culturas, el cuestionamiento de la autoridad y la búsqueda del conocimiento sentaron las bases para el mundo tal como lo conocemos hoy.

La Edad Contemporánea es el período histórico que comienza a finales del siglo XVIII y se extiende hasta la actualidad. Este período está marcado por cambios radicales en la política, la economía, la sociedad y la tecnología.

La Edad Contemporánea es crucial para entender el mundo actual. Las ideologías, conflictos y avances tecnológicos de este período han moldeado la sociedad moderna y continúan influyendo en la política, la cultura y la economía global. Además, los desafíos contemporáneos, como el cambio climático, la globalización y las desigualdades sociales, son herencias de las dinámicas surgidas durante esta era.