Los romanos construyeron cientos de acueductos en todo su imperio, pero algunos destacan por su tamaño, estado de conservación o complejidad. Aquí te mostramos los más impresionantes.
Uno de los acueductos romanos mejor conservados del mundo. Con sus 167 arcos, fue construido sin ningún tipo de cemento, solo piedra colocada con precisión.
Pont du Gard (Francia)
Monumental acueducto de tres niveles ubicado cerca de Nimes. Fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO y es un ejemplo de equilibrio y elegancia.
Acueducto de Roma (Aqua Claudia)
Uno de los más largos de Roma, recorría más de 69 km. Sus ruinas aún se pueden ver en las afueras de la ciudad, integradas en parques y zonas arqueológicas.
Acueducto de Constantinopla (Valente)
Suministraba agua a la capital oriental del Imperio durante siglos. Es un símbolo del poder romano en Bizancio y aún forma parte del paisaje urbano de Estambul.