Templos

Los templos egipcios fueron construidos para el culto oficial de los dioses y la conmemoración de los faraones del Antiguo Egipto en las regiones bajo su dominio. Los templos eran vistos como el hogar de los dioses o faraones deificados a quienes eran dedicados, y en ellos los faraones y el clero egipcio llevaban a cabo diversos rituales, las funciones centrales de la religión egipcia: realizar ofrendas a sus dioses, recrear pasajes mitológicos mediante festivales y protegerse de las fuerzas del caos. Estos rituales eran vistos como necesarios para que los dioses mantuvieran la maat, el orden divino del universo.


Características de los templos egipcios

  • Eran inmensas y solidas construcciones

  • Los muros extraordinariamente gruesos, de caliza o de arenisca y, a veces, de »sienita» (Roca de color rojizo susceptible de pulimento) Alguna veces revestidas de alabastro.

  • Las paredes eran un libro donde se grababa (Jeroglíficos y bajorrelieves) la historia de la vida»Vida y hechos» del faraón constructor.

  • Predomina la linea horizontal. El conjunto produce la sensación de pesadez, acentuada por el hecho de ir perdiendo altura las diferentes secciones del edificio.

  • El elemento portante es la columna, mu abundante, porque el techo es siempre horizontal, formado por largas angostas lajas.


PARTES DEL TEMPLO

El dromos

El dromo en los templos egipcios representaba una avenida en losada, larga y majestuosa, por la cual se llega al templo, exornada con dos hileras de esfinges monumentales.


Los obeliscos

Los obeliscos son dos elevados monolitos, revestidos de jeroglíficos, que cuentan la historia del faraón, los obeliscos de los templos egipcios eran un tipo de dedicación muy antiguo y característicamente de esta cultura. Originalmente, probablemente eran piedras amorfas, colocadas en posición vertical para representar a los benbenen el que los rayos del sol naciente cayeron por primera vez en los albores de la creación. El original estaba en el templo del dios del sol en Heliópolis y se creía que representaba el semen petrificado de Re’-Atum.


El pilono es en realidad la fachada del templo. Monumento masivo construido en piedra, evoca por su forma el signo jeroglífico. “horizonte». De hecho, cuando se levanta por la mañana en el horizonte, se supone que el sol se levanta entre sus dos «torres» de forma ligeramente trapezoidal, coronadas por un techo plano decorado con una cornisa.

La sala hipetra

Estaba a continuación del pilono. Mas que sala, es un patio a cielo abierto. Hasta aquí podían entrar los fieles ordinarios y formar parte en las procesiones en las que llevaban imágenes sagradas


La sala hipóstila

La sala hipóstila del templo egipcio es la pieza principal del templo y, por lo mismo, la de mayor esplendor. Su aspecto es grandioso, debido a sus monumentales proporciones al considerable numero de columnas que formaban una verdadera selva.

Esta sala se caracterizada por un techo que se apoya en un bosque de columnas, para dar la impresión de cruzar un matorral de papiros. Sus capitales son siempre papiriformes (excepto en los templos de la época grecorromana). Las columnas están distribuidas en filas paralelas a ambos lados del pasillo central, son más altas y más masivas.


La cámara del dios.

Esta cámara se caracterizaba por de techo bajo, en ella la oscuridad es casi absoluta.

Las habitaciones de los sacerdotes y una guarnición, justamente con las de los tesoros, completan muchas veces el conjunto del templo.