4 de junio

¡Señor Jesús, en ti confío!


Santoral

Mes del Sagrado Corazón de Jesús. Frase del día: 

 “Que el Sagrado Corazón de Jesús transforme cada vez más tu corazón hasta que sea perfecto y digno de Él”. (San Pío de Pietrelcina) 

Para la reflexión

DOMINGO 4 DE JUNIO. FIESTA DE LA SANTÍSIMA TRINIDAD

En el nombre del Padre, y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

—¿Qué significa lo que acabamos de hacer?

—¿A quiénes saludamos?

Lo que acabamos de hacer es el signo de los cristianos e invocamos a la Santísima Trinidad. Podemos decir que invitamos al Padre y al Hijo y al Espíritu Santo que nos acompañe, que estén presentes no sólo en nuestra vida, sino también en todo lo que realizaremos.

Diálogo con Nicodemo - Juan 3, 16-18


En aquel tiempo dijo Jesús a Nicodemo: -Tanto amó Dios al mundo que le entregó a su Hijo único, para que no perezca ninguno de los que creen en él, sino que tengan vida eterna. Porque Dios no mandó a su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para que el mundo se salve por él. El que cree en él, no será condenado; pero el que no cree, ya está condenado, porque no ha creído en el nombre del Hijo único de Dios.

Explicación

Hoy Jesús, hablando con un fariseo que se llamaba Nicodemo, nos enseña tres cosas: La primera, que Dios Padre nos ama y nos ha enviado a su Hijo Jesucristo. La Segunda que Jesús ha venido a salvarnos. Y la tercera que Dios es vida para los que creemos en él porque nos anima el Espíritu Santo.


Me pregunto...

¿Qué puedes comentar del video?

Oración

El Padre es mi esperanza. El Hijo es mi refugio. El Espíritu Santo es mi protector. 

Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo. Amén.

Capital de Gracias

Para nuestro capital de gracias pedimos a Jesús que nos ayude a amar a los demás como el lo hace.

Consagración a la virgen

Oh señora mía, oh madre mía, yo me ofrezco enteramente a ti.

En prueba de mi filial afecto te consagro en este día, mis ojos,  mis oídos, mi lengua, mi corazón, en una palabra, todo mi ser.

Ya que soy todo tuyo, oh madre de bondad, guárdame,  defiéndeme y utilizame  como instrumento y posesión tuya.

Amén.