09 de octubre

5º y 6º de Primaria

curso 2023 - 2024



Santoral

Frase del día:

Mantén positivos tus valores porque tus valores se convierten en tu destino. Mahatma Gandhi

Lectura del santo evangelio según san Lucas (10,25-37):

En aquel tiempo, se presentó un maestro de la Ley y le preguntó a Jesús para ponerlo a prueba: «Maestro, ¿qué tengo que hacer para heredar la vida eterna?»

Él le dijo: «¿Qué está escrito en la Ley? ¿Qué lees en ella?»

Él contestó: «Amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón y con toda tu alma y con todas tus fuerzas y con todo tu ser. Y al prójimo como a ti mismo.»

Él le dijo: «Bien dicho. Haz esto y tendrás la vida.»

Pero el maestro de la Ley, queriendo justificarse, preguntó a Jesús: «¿Y quién es mi prójimo?»

Jesús dijo: «Un hombre bajaba de Jerusalén a Jericó, cayó en manos de unos bandidos, que lo desnudaron, lo molieron a palos y se marcharon, dejándolo medio muerto. Por casualidad, un sacerdote bajaba por aquel camino y, al verlo, dio un rodeo y pasó de largo. Y lo mismo hizo un levita que llegó a aquel sitio: al verlo dio un rodeo y pasó de largo. Pero un samaritano que iba de viaje, llegó a donde estaba él y, al verlo, le dio lástima, se le acercó, le vendó las heridas, echándoles aceite y vino, y, montándolo en su propia cabalgadura, lo llevó a una posada y lo cuidó. Al día siguiente, sacó dos denarios y, dándoselos al posadero, le dijo: "Cuida de él, y lo que gastes de más yo te lo pagaré a la vuelta." ¿Cuál de estos tres te parece que se portó como prójimo del que cayó en manos de los bandidos?»

Él contestó: «El que practicó la misericordia con él.»

Díjole Jesús: «Anda, haz tú lo mismo.» 

Para la reflexión: cuidar a los demás

Me pregunto...


Oración

 Señor, no quiero pasar de lejos ante la persona herida en el camino de la vida. Quiero acercarme y contagiarme de tu compasión para expresar tu ternura, para ofrecer el aceite que cura heridas, el vino que recrea y enamora. Tú, Jesús, buen samaritano, acércate a mí, como hiciste siempre. 


Capital de Gracias

Hoy ofrecemos como capital de gracias nuestro esfuerzo en ser como el buen samaritano.

Consagración a la virgen

Oh señora mía, oh madre mía, yo me ofrezco enteramente a ti.

En prueba de mi filial afecto te consagro en este día, mis ojos,  mis oídos, mi lengua, mi corazón, en una palabra, todo mi ser.

Ya que soy todo tuyo, oh madre de bondad, guárdame,  defiéndeme y utilizame  como instrumento y posesión tuya.

Amén.