27 de noviembre
Secundaria - Bachillerato
curso 2023 - 2024
Santoral
FRASE DEL DÍA
Da lo que tienes para que merezcas recibir lo que te falta.
(San Agustín)
Lectura del santo evangelio según san Lucas (21,1-4):
En aquel tiempo, alzando Jesús los ojos, vio unos ricos que echaban donativos en el arca de las ofrendas; vio también una viuda pobre que echaba dos reales, y dijo: «Sabed que esa pobre viuda ha echado más que nadie, porque todos los demás han echado de lo que les sobra, pero ella, que pasa necesidad, ha echado todo lo que tenía para vivir.»
Palabra del Señor.
Para la reflexión:
NO MIRES LAS APARIENCIAS
Jesús no mira las apariencias y por eso se impresiona con el gesto de esa mujer pobre. Lo ha dado todo para Dios, ¡todo lo que tenía para su existencia! Y Jesús no se queda indiferente ante tal gesto. Hasta se lo comunica a sus apóstoles diciendo: “aprended de esa mujer lo que es creer de veras en Dios”. Aprended a darlo todo.
Hay tanta gente que lo da todo en nuestro mundo y, quizás sería importante abrir más los ojos y no dejarnos impresionar por las apariencias sino mirar con la mirada de Cristo y obrar con la generosidad de esa viuda. Porque para Dios ella no ha quedado desamparada. A los que así obran, Dios no los abandona sino que se conmueve de amor ante sus pequeños actos de generosidad. Pensemos sólo que gracias a ese pequeño acto de la viuda ella sigue siendo hasta ahora modelo para nosotros.
Me pregunto...
Cuando ayudo a los demás, ¿doy lo que tengo o doy aquello que me sobra?
¿Me reservo cuando me doy a los demás?, ¿busco mis propios intereses?, ¿me entrego sin esperar nada a cambio?, ¿doy mi amor de manera gratuita?
Oración
Señor, contemplando el ejemplo de la viuda pobre del Evangelio, quiero ofrecerte mi vida, entregártela sin reservas, como lo hizo la Virgen María. Concédeme tu gracia en esta oración para que este ofrecimiento sea una realidad.
No puedo darte nada que no haya recibido de Ti, por lo que me pongo en tus manos en este día para que me utilices según tu voluntad. Quiero aprender a darlo todo por Ti y por los demás, con alegría, generosidad y caridad. Ayúdame a creer que con tu gracia podré vivir desprendido de las cosas y sabré entregarme sin mirarme a mí.
Amén.
Capital de Gracias
No ofrecer a los demás lo que me sobra, tomar ejemplo de la viuda que da todo lo que tenía para vivir, y así se da a sí misma. Voy a intentar en este día dar mi tiempo al escuchar con antención, acompañar, ayudar, agradecer, servir a los demás.
Consagración a la Virgen
Oh señora mía, oh madre mía, yo me ofrezco enteramente a ti.
En prueba de mi filial afecto te consagro en este día, mis ojos, mis oídos, mi lengua, mi corazón, en una palabra, todo mi ser.
Ya que soy todo tuyo, oh madre de bondad, guárdame, defiéndeme y utilízame como instrumento y posesión tuya.
Amén.
Lector: REINA DE LA FAMILIA Y MAESTRA DEL HOMBRE NUEVO
Todos: ¡Ayúdanos en la misión!