2 de abril

Secundaria - Bachillerato

curso 2023 - 2024



Santoral

FRASE DEL DÍA
OCTAVA DE PASCUA

La Resurrección de Cristo es nuestra fuerza.
(Papa Francisco)

Lectura del santo evangelio según san Juan (20,11-18):


En aquel tiempo, estaba María fuera, junto al sepulcro, llorando. Mientras lloraba, se asomó al sepulcro y vio dos ángeles vestidos de blanco, sentados, uno a la cabecera y otro a los pies, donde había estado el cuerpo de Jesús.

Ellos le preguntan:

«Mujer, ¿por qué lloras?».

Ella contesta:

«Porque se han llevado a mi Señor y no sé dónde lo han puesto».

Dicho esto, se vuelve y ve a Jesús, de pie, pero no sabía que era Jesús.

Jesús le dice:

«Mujer, ¿por qué lloras?».

Ella, tomándolo por el hortelano, le contesta:

«Señor, si tú te lo has llevado, dime dónde lo has puesto y yo lo recogeré».

Jesús le dice:

«¡María!».

Ella se vuelve y le dice.

«¡Rabbuní!», que significa: «¡Maestro!».

Jesús le dice:

«No me retengas, que todavía no he subido al Padre. Pero, ande, ve a mis hermanos y diles: “Subo al Padre mío y Padre vuestro, al Dios mío y Dios vuestro”».

María la Magdalena fue y anunció a los discípulos:

«He visto al Señor y ha dicho esto».

Palabra del Señor.

Para la reflexión:

CRISTO HA RESUCITADO.

Estamos de celebración. Jesús sigue con nosotros, no se ha quedado en el Sepulcro.

Con toda la Iglesia gritamos y cantamos: ¡Cristo ha resucitado!

Somos TESTIGOS DE LA RESURECCIÓN.

Cuentan que en cierta ocasión, llegó un misionero a un pueblo indígena. Los habitantes del pueblo recibieron al misionero con grandes atenciones y se dispusieron a escucharlo.

‐ Vengo a traerles una Buena Nueva, la noticia de un Dios que nos quiere a todos y desea que vivamos como auténticos hermanos, sirviéndonos y ayudándonos unos a otros. ¿Van a aceptar la noticia que les traigo y a recibir en sus corazones a ese Dios que nos ama?

Calló el misionero y los indígenas permanecían en silencio.
‐ ¿Lo aceptan o no lo aceptan?‐ insistió desconcertado el misionero.
Al rato, se alzó serena la voz del uno de ellos diciendo:
‐ Quédate a vivir con nosotros unos días y si en verdad vives lo que quieres enseñarnos, entonces volveremos a escucharte.

Me pregunto...

¿Creo verdaderamente que Jesús ha resucitado para darme vida?
¿Este acontecimiento cambia mi vida?
¿Estoy alegre porque está vivo para siempre?

Oración

Sin duda, Jesús, que hoy más que nunca, estamos llamados a vivir en clave de Resurrección.

Las noticias, los periódicos, el día a día.... nos descubren un mundo teñido de muerte, de envidia, de violencia, de egoísmo...

Un mundo negro con muchos matices oscuros que obligan al hombre a no ser feliz.

Nosotros, Señor Jesús, queremos luchar para que la vida, la resurrección, triunfen en nuestro mundo.

Danos fuerza para conseguirlo. Gracias Jesús.

Capital de Gracias

Ofrecemos al capital de gracia todo lo bueno que hemos vivido en estas vacaciones. Las alegrías que hemos recibido de nuestros amigos y familiares. Lo ponemos en los brazos de María, primer testigo de la Resurrección.

Consagración a la Virgen

Oh señora mía, oh madre mía, yo me ofrezco enteramente a ti.

En prueba de mi filial afecto te consagro en este día, mis ojos,  mis oídos, mi lengua, mi corazón, en una palabra, todo mi ser.

Ya que soy todo tuyo, oh madre de bondad, guárdame,  defiéndeme y utilízame  como instrumento y posesión tuya.

Amén.