Y tú... ¿qué pintas?

Podemos escuchar esta expresión y sentir que nos están cuestionando nuestra presencia, nuestra opinión, nuestro ser. Pero lo cierto es que... aquí todos pintamos algo.


Cada uno de nosotros somos como un color, que pinta lo que está gris a nuestro alrededor.

En la "Parábola de los talentos" Mt 25, 14-30, Jesús nos enseña la importancia de invertir nuestras riquezas, de multiplicar nuestros dones, de dar visibilidad a lo que somos, de compartir lo que tenemos. No sólo lo material, sino los dones con los que hemos sido premiamos. Esos con los que podemos dar color y pintar un mundo mejor.

Colorear de verde los bosques que han sido quemados. De azul los mares contaminados, colorear de amarillo los campos de trigo y de celeste el azul del cielo. Colorear de rojo el corazón de cada persona, igual al Corazón de Jesús.


Si alguien te dice "Y tú ¿qué pintas?" ¿Sabrías qué responder? ¿Conoces tus dones, tus talentos? ¿Estás disponible para dar color?

Y tú ¿qué vas a pintar? ¡¡Coge tu pincel y prepárate!! 


Déjate acompañar, María Madre de la Iglesia y el Corazón de Jesús te guiarán. 

¡¡Feliz curso!!


¡FELIZ OBRA DE ARTE!