Para los padres de niños o adolescentes con TDAH, es fundamental contar con herramientas y estrategias que les ayuden a manejar tanto los síntomas de sus hijos como las propias dificultades que puedan surgir en el hogar. A continuación te comparto algunas técnicas específicas que pueden ser útiles para los padres:
Estructura diaria: Los niños con TDAH suelen sentirse más seguros cuando tienen rutinas claras y predecibles. Establecer horarios regulares para las actividades diarias, como el despertar, las comidas, las tareas y el descanso, puede ayudarles a sentirse más organizados y menos ansiosos.
Transiciones suaves: Los cambios de una actividad a otra pueden ser difíciles. Ayuda a que tu hijo tenga tiempo para adaptarse de una tarea a otra. Puedes usar temporizadores visuales o avisos para que sepan qué está por suceder
Espacio de trabajo ordenado: Tener un lugar específico para hacer tareas o estudiar, libre de distracciones, puede facilitar la concentración. Mantén el área limpia y con materiales organizados.
Refuerzo positivo: Elogiar los esfuerzos y logros de tu hijo es clave. No es solo importante premiar los resultados, sino también el esfuerzo, incluso si no se logra el objetivo completo. Esto ayudará a reforzar la motivación.
Reglas claras: Establecer reglas claras y simples y asegurarte de que tu hijo las entienda es fundamental. Asegúrate de que las consecuencias por el incumplimiento de estas reglas también sean claras.
Evitar castigos duros: Los niños con TDAH suelen reaccionar mejor a consecuencias consistentes y predecibles que a castigos excesivos. La disciplina positiva, que se basa en enseñar a través de la guía y la conversación, puede ser más efectiva que el castigo