Desde el Noviciado de la Provincia Ibérica, Jacinta, Antonia, Florinda y Osvadina, nos invitan a acompañarlas con nuestra presencia y oración a la Eucaristía de su Profesión Temporal, que tendrá lugar el próximo 25 de marzo a las 17,30hs, en la Capilla de la Casa Madre, en Madrid.

Nos unimos a su acción de gracias en este día tan señalado

El día 25 de marzo, en la Casa Madre, hemos celebrado con gran alegría nuestra profesión temporal. Damos gracias a Dios por el don de la vida y por llamarnos a servir en la Iglesia a nuestros hermanos. Fue una gracia haber podido celebrar nuestra profesión el día de la Anunciación. Que el SÍ de María sea para nosotras ejemplo y estímulo en nuestro camino. Pedimos al Señor que nos dé la gracia de vivir esta nueva etapa que comenzamos con ilusión y pasión, en fidelidad, entrega y perseverancia.

Nuestro agradecimiento para todos los que han estado presentes, directa o indirectamente:

¡Proclama mi alma la grandeza del Señor!

Al igual que María damos gracias a Dios por el don de la vida, de la vocación, por llamarnos a hacer parte de su reino. Agracemos a nuestros padres, familias que nos han dado la vida y han contribuido para nuestro crecimiento.

Queremos expresar nuestro agradecimiento a todos vosotros que nos acompañáis en este día significativo y a todos aquellos que nos acompañan desde lejos, y a todos los que han estado presentes en nuestro camino, ayudándonos directa o indirectamente con sus oraciones y consejos.

Queremos agradecer a la Congregación que nos ha acogido y acompañado como hermanas. Agradecemos a la Madre General, M. Rosario, a la Madre Provincial, M. Inmaculada, al equipo formativo del noviciado, a nuestra maestra, hermana María…sin palabras; como dice Pedro: “Tú lo sabe todo”

Agradecemos a las comunidades en las que hemos hecho la experiencia comunitaria y pastoral, a nuestra compañeras las cuatro novicias, a los profesores del Instituto Regina Apostolorum, y a los colegas, amigos y compañeras/os del Instituto, a las parroquias del Santo Ángel y de San Diego, a todos los sacerdotes que concelebráis, en especial al padre Blas que nos ha brindado con sus palabras, sin olvidar este maravilloso y grandioso coro y a la comunidad de la Casa Madre…para todos ellos pedimos un aplauso.

Como son muchas las personas a las que tenemos que agradecer, lo vamos a expresar con una canción, danzando. Os invitamos a dar gracias a Dios con nosotras.

A todos: ¡MUCHÍSIMAS GRACIAS!!

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