MÉTODOS

-Comenzamos cogiendo los dos vasos de plástico, que colocaremos uno al lado del router y el otro alejado de este. A continuación, cogemos las semillas de haba muchamiel y dejamos dos semillas en cada vaso, acompañado de un algodón y un poco de agua. Esto ayudará a que las semillas germinen, para después plantarlas.


Esto, para minimizar errores, se hizo en cuatro casas distintas. Es decir, dos vasos por vivienda, uno cerca del router y otro lejos.


Casa 1: Vaso junto al router (Vaso C1) y vaso alejado del router (vaso L1).


Casa 2: Vaso junto al router (Vaso C2) y vaso alejado del router (vaso L2).


Casa 3: Vaso junto al router (Vaso C3) y vaso alejado del router (vaso L3).


Casa 4: Vaso junto al router (Vaso C4) y vaso alejado del router (vaso L4).



-Tras finalizar con el paso anterior, una vez ya las semillas germinadas, podemos ir quitando las semillas y algodones, e ir echando la tierra a los dos vasos, hasta llegar a tres dedos menos del borde de los dos vasos. A continuación, comenzamos a echar las semillas de haba a cada vaso, procurando que en cada vaso haya dos semillas de habas.



-Para finalizar lo anterior, vertemos en los dos vasos (C y L) la tierra y dos semillas de habas en cada vaso, 50 ml de agua, y los volveremos a regar cada dos días. 



- Todo el proceso de germinación y plantación ha sido realizado con una planta al lado del router (vaso C), y la otra alejada (vaso L), en un lugar que cumpla las mismas condiciones de luz, humedad y temperatura, pero alejado del router. Así, aislando variables, tratamos de asegurarnos de que todas las diferencias que veamos sean debidas al router y no a otra variable.