Privacidad

A nadie se le ocurre salir a la calle totalmente desnudo, ni tampoco tan cubierto de ropa que no se le vean ni los ojos. en Internet hay que decidir qué información queremos que se mantenga en privado y cuál queremos hacer pública. Seguramente un camino intermedio sería el más adecuado.

Hay una buena fórmula para poder navegar por Internet sin poner en riesgo nuestra información personal: utilizar el sentido común.